El mes de enero de 2015 ha sido normal en Mallorca y Menorca y más frío de lo normal en Ibiza, según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).
En el conjunto nacional, ha sido ligeramente más frío de lo normal, con una temperatura media mensual de 6,9 grados centígrados, es decir, 0,4 grados centígrados menos que la media habitual de acuerdo con el periodo de referencia (1981-2010).
Así, la portavoz de la AEMET ha explicado a Europa Press que se trata del duodécimo mes de enero del siglo XXI en España, según orden descendente de temperatura media y ha sido el segundo mes de enero con las temperaturas mínimas más bajas del siglo.
En concreto, durante la primera quincena del mes, la abundancia de días poco nubosos ha dado lugar a una oscilación térmica «bastante superior a lo normal», de forma que mientras las temperaturas mínimas han sido en promedio 1,1º C inferiores al valor medio, las máximas se situaron 0,5º C por encima de dicho valor. «Se ha tratado del segundo mes de enero de temperaturas mínimas diarias más bajas del presente siglo», ha apuntado.
Por zonas, ha informado de que los termómetros marcaron valores en torno a los normales en el centro peninsular y en el tercio oriental mientras que el mes tuvo carácter «frío» en el resto de la Península. Casals ha precisado que resultó «incluso muy frío» en amplias áreas de Castilla y León y Extremadura, donde las anomalías negativas de las temperaturas medias mensuales fueron mayores de 1 grado centígrado.
Por su parte, en Canarias las temperaturas fueron en general inferiores a las normales, especialmente en las islas más occidentales.
La primera quincena se caracterizó por las «fuertes oscilaciones térmicas diurnas», con máximas «relativamente suaves» y mínimas «bajas con abundantes heladas».
En concreto, hubo un período de temperaturas bajas entre los días 16 y 24 cuando se produjo la entrada de una masa de aire frío procedente del norte de Europa. En los últimos días del mes se produjo un apreciable ascenso térmico, sobre todo el día 30, cuando sobre todo subieron las nocturnas.
La portavoz ha indicado que la más baja entre estaciones principales se alcanzó en Molina de Aragón con -9,4º C el día 1. Entre capitales de provincia, ha destacado los -9 grados centígrados en Burgos-Villafría el día 24; -8,1 grados centígrados el día 7 de enero en Segovia; y -8 grados centígrados ese mismo día en Salamanca y Teruel. «Hubo numerosas capitales de provincia con valores mínimos mensuales comprendidos entre -5º C y -7º C», ha dicho.
Por el contrario, las más elevadas del mes se registraron el día 30 en las zonas costeras del sureste peninsular, especialmente en la región de Murcia donde llegaron a superar los 25 grados centígrados.
Los valores más altos de enero se observaron en las estaciones de Murcia con 25,5 grados centígrados y Murcia-Alcantarilla con 25,2 grados centígrados. También se registraron temperaturas máximas relativamente elevadas en torno a los días 10 y 11, destacando el observatorio de Valencia con una máxima de 24,4º C, valor igualado por Lanzarote-aeropuerto el día 15.
Algo más seco de lo normal
Respecto a las precipitaciones, el mes de enero resultó «normal o ligeramente más seco de lo normal», con una precipitación media sobre España de 58 litros por metro cuadrado, es decir casi un 10 por ciento menos de la media del mes, que son 63 litros por metro cuadrado respecto al periodo de referencia 1981-2010.
La portavoz ha explicado que las precipitaciones en este periodo se produjeron «casi en su totalidad» los tres últimos días del mes y entre los días 15 y 22.
Por zonas, superaron los valores normales del mes en el centro y norte de Galicia, regiones cantábricas, La Rioja, Navarra y extremo norte de Castilla y León, así como en el área del Sistema Central, noreste del Sistema Ibérico, zonas montañosas del sureste peninsular, Menorca y parte de Mallorca.
Mientras, en amplias áreas de la vertiente cantábrica las precipitaciones mensuales duplicaron los valores medios precisamente por las «intensas» precipitaciones de los últimos días del mes. En el resto de España el mes fue normal o seco, con un déficit de precipitaciones más apreciable, superior al 50 por ciento del valor medio, en Cataluña, franja costera mediterránea desde el norte de Valencia a Almería, noroeste de Extremadura y gran parte de Canarias.
En concreto, ha apuntado que durante los diez primeros días del mes apenas hubo precipitaciones y las que se registraron fueron débiles en casi todos los casos en las regiones cantábricas y en canarias. Las cantidades registradas superaron ligeramente los 10 litros por metro cuadrado en zonas elevadas de la isla de Tenerife.
Lluvias concentradas
La segunda decena fue mucho más húmeda que la anterior y las precipitaciones se extendieron por todas las zonas, habiendo sido mas intensas en el noroeste peninsular, regiones cantábricas y suroeste de Andalucía. Las cantidades totalizadas superaron los 100 litros por metro cuadrado en el oeste de Galicia y sierra de Grazalema.
Mientras, Casals ha destacado que en la tercera decena hubo precipitaciones «en casi toda España, que fueron muy copiosas en la franja norte peninsular y en áreas del Sistema Central». Las cantidades acumuladas llegaron a superar los 200 litros por metro cuadrado en diversas zonas del interior de Cantabria, País Vasco y norte de Navarra.
Entre los episodios de precipitaciones intensas del mes de puede citar el que afectó al sur de Andalucía el día 18 y sobre todo el que afectó al norte peninsular y a zonas montañosas del centro entre los días 29 y 31, que dio lugar a precipitaciones intensas y persistentes, que inicialmente en forma de lluvia hasta cotas muy altas bajando posteriormente la cota de nieve de forma progresiva.
En este episodio se registró la mayor precipitación diaria del mes en un observatorio principal que correspondió a Navacerrada con 127,3 litros por metro cuadrado el día 30, seguido Rota con 89,4 litros por metro cuadrado el día 18 y Bilbao-aeropuerto con 82,1 litros por metro cuadrado el día 30.