La Fiscalía Anticorrupción dio ayer por concluida la primera fase de la 'Operación Pomada' sin imputar ni citar siquiera a declarar al principal responsable público de la presunta trama urbanística por prevaricación y malversación de dos millones de euros que investiga desde el lunes a raíz del caso Nerer, Avel·lí Casasnovas.
El exconcejal de Urbanismo, quien propuso las operaciones, permutas y tasaciones aprobadas por el Ayuntamiento de Ciutadella y denunciadas posteriormente por los grupos de la oposición, ha seguido las pesquisas de las últimas 48 horas a través de los medios, con el convencimiento de que en cualquier momento sería llamado a testificar por el fiscal.