Acciona ha presentado una reclamación ante el Ministerio de Medio Ambiente en la que renuncia a la desaladora de Ciutadella que terminó de construir hace cinco años y exige oficialmente el pago de todos los costes, incluido el mantenimiento que ha tenido que sufragar desde la conclusión de las obras, a principios de 2010.
Así lo han confirmado a este diario portavoces oficiales de empresa concesionaria, que no ha podido siquiera poner en funcionamiento la instalación al no haberse conectado la planta a la red de suministro municipal.
Fuentes de la Conselleria de Medio Ambiente del Govern cifran el importe de la reclamación en torno a 15 millones de euros, ya que incluiría también el lucro cesante y el pago del canon anual correspondiente, pero este extremo no ha podido ser confirmado oficialmente.