El GOB festeja la rescisión del contrato con la UTE encargada de las obras de mejora de la carretera general entre Maó y Alaior. «Menorca escribe así un nuevo episodio de defensa de su idiosincrasia», señala en un comunicado.
El grupo ecologista, que fue el alma de la protesta social contra lo que denomina «el polémico proyecto de las macrorrotondas de la carretera general», ya había preparado un acto informativo para el miércoles 17 en el que planteará diversas posibilidades para cada enlace. De ese modo, pretende contribuir con ideas al nuevo proyecto, -«tarea que ha de abordarse en los próximos meses»-, cuya redacción ha de sacar de nuevo a concurso el Consell. Agrega el GOB que la rescisión abre la oportunidad para redefinir lo que ha de hacerse con los enlaces que más contestación habían suscitado, Biniai, Alcaidús, la Argentina «y, en menor medida, Alaior».
La movilización social no ha sido inútil, alaba el grupo ecologista, que hace memoria de la misma, «una de las controversias territoriales más vivas de los últimos tiempos parece que ha entrado administrativamente en el camino de la reconducción. La construcción de cuatro rotondas de doble nivel entre Maó y Alaior levantó muchas voces en contra. Personalidades de todo tipo advirtieron de la desfiguración que ello podía causar en una isla conocida por la calidad de su paisaje».
Dado que con o sin rotondas, lo que si esta claro es que se va a mejorar la carreta principal de la isla, aprovecho la ocasión para sugerir modestamente, y visto el incremento, cada año mas, de personas que practican el ciclismo, construir un carril mas, es decir, dejarla con tres carriles. Puesto que durante la temporada de invierno, es cuando menos se necesita este tercer carril, este se abriría para los ciclistas y en verano para los automóviles. Al mismo tiempo esto seria una forma de alargar la temporada turística.