El Ayuntamiento de Ciutadella ha pedido formalmente a la Subdirección General de Obras y Patrimonio del Ministerio de Justicia rescindir el contrato de alquiler de Can Saura y, en paralelo, Ports de les Illes Balears ha ofrecido en Madrid la antigua estación marítima como alternativa.
La doble solicitud fue revelada este jueves por la alcaldesa Joana Gomila, justo cuando hace once meses que su predecesor, Ramón Sampol, firmó el contrato de arrendamiento que ya habría permitido al Consistorio cobrar más de 120.000 euros. «Pero ni ellos nos han pedido las llaves ni subsanado las deficiencias que detectamos en el proyecto, ni nosotros les hemos emitido una sola factura», recordó Gomila, para quien «una resolución amigable y de mutuo acuerdo sería la mejor solución, y más ahora que el Ministerio ya cuenta con un espacio alternativo».
Según desveló, las condiciones requeridas por Ports «son muy similares» a las pactadas en su día entre el Ayuntamiento y el Ministerio (a razón de 522.720 euros por cuatro años de alquiler), «aunque con la posibilidad de alargar el plazo si Justicia lo estimara necesario».