El Ayuntamiento de Ciutadella ha recibido el apoyo de la Conselleria de Medio Ambiente del Govern, que comparte la decisión municipal de ordenar la clausura inmediata del aparcamiento privado de Macarella, el único de pago que quedaba en toda la Isla.
La Conselleria dirigida por Vicenç Vidal, además, se pone a disposición del Consistorio para «facilitar aquello que necesite o requiera» con el fin de hacer efectivo un cierre, que el portavoz de la propiedad, Pere Bagur, anunció para el próximo 10 de septiembre.
El Govern es la otra administración pública competente en este asunto, puesto que la zona habilitada como estacionamiento se encuentra dentro del área de protección Red Natura 2000 y la actividad suponía el incremento del riesgo de incendio en zona protegida.
Aún así, desde Medio Ambiente constatan que por su parte no se ha abierto ningún expediente ni documento sancionador en relación con el parking ilegal ubicado en la finca rústica de Santa Anna, como sí ha hecho, en cambio, el Ayuntamiento de Ciutadella.
Conscientes de que podían actuar porque allí se estaba desarrollando una actividad económica irregular, preferían esperar a que el Consistorio tomara cartas en el asunto antes de actuar, puesto que la infracción de operar sin licencia de actividad es responsabilidad, en primer lugar, de la administración local.
El viernes pasado el Ayuntamiento de Ciutadella ordenó a la propiedad el cierre del aparcamiento en un plazo máximo de 15 días, después de haber estado operativo, con algunos paréntesis, a lo largo de las dos últimas décadas. Además, impuso una sanción económica por la infracción cometida.
Ahora, el Consistorio, pero sobre todo el Consell, trabajan para encontrar soluciones y posibles alternativas para hacer frente a la gran cantidad de coches que vendrán la temporada siguiente y que únicamente dispondrán de las 160 plazas del aparcamiento público.
Las 380 que se ofrecían de manera irregular ya no estarán activas. La solución pasaría por modificar el Plan Especial.