Si llega el caso de quedarse solo por el abandono de los concejales socialistas, Pere Moll afirma estar dispuesto a gobernar en solitario, por decreto, hasta que una moción de censura le eche de la Alcaldía. El escrito de la asamblea socialista de Es Migjorn del pasado jueves plantea tres puntos de acción. El primero de ellos le pide que deje el cargo por voluntad propia. Contestó de inmediato que no y le dijeron que respondiera por escrito. Este lunes por la mañana escribió la carta ratificando su voluntad de seguir en la Alcaldía y por la tarde debía entregarla al partido, cuyo mandatario ahora en Es Migjorn es su predecesor en el cargo Pere Riudavets.
Grupo «a banda»
El segundo punto, en caso de no cumplirse el primero, habla de la constitución de un «grup socialista a banda», lo que supondría dejarle solo en el grupo socialista actual. El tercer punto, en lógica consonancia con el segundo, propone «forzar la salida del alcalde», expresión eufemística de presentar la moción de censura. El escrito se aprobó en la asamblea con siete votos a favor y uno en contra, el del propio Pere Moll.
Los puentes de diálogo están rotos, el alcalde atendió este lunes a los medios de comunicación pero no intercambió ninguna conversación con sus todavía compañeros de grupo y de partido. La presidenta de la gestora socialista no descarta una reconducción de la situación por esa vía, aunque sabe que el tiempo transcurrido desde el inicio de la crisis -20 de diciembre- lo complica. Además, se ha optado por no intervenir y que se resuelva en el ámbito local.