El Ayuntamiento de Maó anunció este miércoles la finalización de los trabajos para dotar al cuartel de Santiago de un nuevo sistema de canalización que permita recoger el agua de lluvia y conducirla hasta el aljibe que hace unos meses fue recuperado en el patio interior del edificio. En concreto, las obras han consistido en la conexión de los bajantes de los tejados del emblemático edificio con el pozo en el que se almacenará el agua como medida para combatir los problemas derivados de la sequía.
La finalización de estos trabajos permitirá recoger el agua de lluvia que caiga sobre los más de 1.400 metros cuadrados de extensión que tienen los tejados del edificio. El aljibe del cuartel de Santiago tiene una capacidad de 200 metros cúbicos y desde el pasado mes de noviembre se está utilizando para la limpieza de las calles. Estos trabajos se enmarcan en el plan de recuperación de los aljibes puesto en marcha por el Consistorio ante los problemas de sobreexplotación del acuífero. El concejal de Microciudad, Manolo Lora, explicó que «seguimos con preocupación el problema de escasez y calidad del agua, por ello impulsamos medidas de recuperación de aljibes como el de Santiago y el del parque de Ses Rodees».