El estado de los cuarteles de Es Castell, especialmente el del antiguo Cuartel de Ingenieros, va cada a día a peor sin que la sociedad propietaria de los inmuebles, la Sareb ?que gestiona los activos de los bancos nacionalizados?, muestre hasta el momento ninguna intención de evitarlo. El deterioro flagrante de uno de los edificios más emblemáticos del municipio, el Conde de Cifuentes, evidencia que el llamado banco malo no está cumpliendo con el convenio suscrito con el Ayuntamiento, plenamente en vigor, que le obliga a asegurar como mínimo la impermeabilidad y el buen aspecto visual de la fachada.
No hace falta una exploración muy detallada para comprobar que no se está garantizando. Ninguna de las 66 ventanas de la fachada principal del cuartel de ingenieros conserva los cristales y las maderas que las protegen ?no en todas las ventas? se encuentran en estado de putrefacción.
La fachada está salpicada de desconchados que dejan ver el encalado que hay debajo de la pintura roja, e incluso el hormigón, dando al conjunto del inmueble una apariencia ruinosa que contrasta con el inmaculado estado de la casa consistorial y afea uno de los puntos más visitados del municipio.