Macarella deja de estar entre las playas más saturadas de la Isla. Llevaba unos años ocupando los primeros puestos de entre los enclaves con mayor densidad de usuarios, pero la disminución del número de plazas de aparcamiento disponibles para poder acceder a ella ha duplicado el espacio por usuario. El bañista contó el año pasado con 12,6 metros de arena cuando en ejercicios anteriores la superficie por usuario oscilaba entre los 4,5 y los 5,6 metros cuadrados. Justo para poner una toalla. En 2016, era una de las playas más frecuentadas por los bañistas, se encontrada entre las diez con mayor densidad. El año pasado, se alejó de este ranking ocupando ya el puesto 22.
Según el estudio del Observatori Socioambiental de Menorca (Obsam) sobre la densidad de usuarios en las playas de Menorca, la cifra máxima de bañistas en esta playa menorquina alcanzó los 385 usuarios cuando en el ejercicio anterior se rozaron los 900 usuarios. Curiosamente, el efecto no ha sido tan destacable en la hermana menor Macarelleta que a pesar de reducir levemente el número de usuarios (de 317 a 279 bañistas), la superficie por bañista se mantiene prácticamente intacto, pasa de 3 a 3,5 metros cuadrados de arena. Este hecho demuestra que el interés sigue concentrándose en esta playa.