La calidad de las aguas de baño bajó el año pasado en cuatro de las nueve playas urbanas de Ciutadella. Así lo revela un informe sobre el estado de las playas publicado por el Observatorio Socioambiental de Menorca (Obsam).
Se trata de las playas de Cala Blanca, Cala en Bosc, Cala en Forcat y Platja Gran cuya calificación de las aguas ha pasado de ser «excelente» a «buena». La playa de Sa Caleta también obtiene esta calificación, aunque en este caso ya la obtuvo en 2016.
El informe, basado en los análisis microbiológicos que se toman de forma periódica, incide que en «la zona de Ciutadella en días puntuales se han observado valores superiores a los umbrales» establecidos en la normativa. En este sentido, cabe destacar que se analizan dos tipos de bacterias indicadoras de contaminación fecal: el enterococo intestinal y la escherichia coli. En función de los porcentajes positivos de los muestreos, basados en unos parámetros para cada tipo de bacteria, a final de temporada se califica el estado de las aguas de baño como excelente, buena, suficiente e insuficiente.