El Consorci de Residus i Energia de Menorca ha puesto en marcha la segunda edición de la campaña de autocompostaje «Fer compost és la pera!». Esta iniciativa pretende fomentar una actividad que, de llevarse a cabo, reduce en 90 kilos al año la generación de basura por habitante.
Para contribuir a la lucha contra el cambio climático y favorecer el desarrollo sostenible, la entidad (integrada por ayuntamientos y Consell), incide en la necesidad de hacer una buena gestión de los residuos. Para ello, pretende impulsar la transformación de residuos orgánicos de cocinas, jardines y huertos en abono, a través de una segunda ronda de talleres para aprender a hacer compost en particulares, con un sencillo compostador en el patio de casa.
Así, los residuos que una vivienda genera y que contienen un 40 por ciento de materia orgánica pueden ser reciclados y devueltos a la tierra para plantas y cultivos. Asimismo, reducir el número de kilos de basura y, también, el consumo de abonos químicos.
Nueve talleres
Con estos argumentos, el Consorci ofrecerá un total de nueve talleres entre los meses de febrero y abril, en varios municipios de la Isla, donde sortearán compostadores entre los asistentes. «El mejor residuo es el que no se produce, motivo por el que tenemos la obligación legal y moral de buscar estrategias para reducirlos», concluye.