Una producción local insuficiente con respecto a la demanda y, por tanto, una destacada dependencia del exterior y la necesaria importación de productos alimentarios tanto primarios como elaborados. Y es que Menorca trae de fuera la friolera del 80,6 por ciento de los productos que consume. Tan solo el 19,4 por ciento se refiere a producto local. Así se desprende del «Estudio del potencial de producción y flujos alimentarios de Menorca», elaborado por el ingeniero de Montes y consultor ambiental y energético José Joaquín García.
Menorca consume 77.910 toneladas de alimentos al año. Y de ellos, llegan del exterior 62.798 toneladas. El consumo de producto local queda limitado a las 15.112 toneladas restantes. Una proporción que, sin duda, se antoja irrisoria.
El informe confirma, sin ambages, que la agricultura es escasa, salvo para la alimentación del ganado. No hay suficiente diversificación de cultivos. Los costes de producción son muy elevados para que la actividad sea rentable. Y además, asegura el técnico, que uno de los motivos por los que no se adquieren productos locales es por la escasez de suministro en determinadas épocas del año. Los consumidores valoran positivamente la calidad del producto local, aunque pesa más su precio, elevado. Y en cuanto al sector hostelero, pese a valorar también el producto de proximidad por su calidad, considera, no obstante, que el producto importado tiene mejor precio y mayor variedad. Por tanto, alerta de la falta de competitividad. Además, las limitadas vías de comercializacion y la falta de técnicas innovadoras en el manejo del cultivo redundan en que los productores vean reducidos sus beneficios en favor de los mayoristas. Una situación que se ve favorecida por el escaso grado de agrupamiento del sector.
Este informe, presentado ayer en Es Mercadal por la presidenta del Consell, Susana Mora, y el conseller de Medio Ambiente y Reserva de Biosfera, Aram Ortega, desvela que la Isla comercializa cerca de 27.000 toneladas de productos alimenticios locales al año (hay que puntualizar que de las 57.625 toneladas de leche que se producen, más de 42.000 se transforman en queso y derivados, por tanto no se comercializan como tal). El 56 por ciento se consume aquí (son 15.112 toneladas) y el 43 por ciento restante (11.752 toneladas) se exporta. Se trata, de forma concreta, de leche y queso. Llama especialmente la atención que en lo que se refiere al queso, se consume producto importado en casi su totalidad. Consumimos 6.600 toneladas y traemos del exterior 6.143 toneladas. De las 3.552 toneladas que se fabrican en la Isla, algo más de 2.000 acaban consumiéndose fuera de nuestras fronteras, según los datos facilitados por este estudio.
En cuanto a fruta, huerta, carne y pescado, la producción local es insuficiente para cubrir la demanda. Y es que, si en la Isla se consumen 15.814 toneladas de fruta, la Isla solo produce 1.030. Lo mismo ocurre con el producto de huerta. Se consumen más de 10.200 toneladas y solo se producen 1.038. Si nos centramos en la carne y el pescado, producimos en la Isla solo el 25,8 y el 9,4 por ciento, respectivamente, de todo lo que se acaba consumiendo.
Así las cosas, llegan por vía marítima la friolera de 14.784 toneladas de fruta, otras 9.168 de hortalizas, 5.209 toneladas de carne y 2.721 de pescado, entre otros productos, para cubrir toda la demanda.
En lo que se refiere al consumidor, hay que indicar que algo más de la mitad (el 56,7 por ciento) de lo que se consume en Menorca acaba en los frigoríficos de nuestros hogares. Se trata, en número absolutos de 44.200 toneladas de consumo doméstico. El turista que se aloja en apartamentos y viviendas vacacionales concentra otro 9 por ciento. Los visitantes alojados en establecimientos hoteleros demandan 9.920 toneladas de alimentos, lo que representa en cifras porcentuales el 12,7 por ciento de las necesidades alimentarias totales. Y en los bares, restaurantes y cafeterías, se consumen 16.790 toneladas de alimentos, el 21,6 por ciento del total.