Mientras se llevan a cabo las obras de la segunda fase de la reforma del puerto interior de Ciutadella, se ha registrado también el debate sobre la ordenación de las terrazas y la sustitución de los toldos de los restaurantes de esta zona. Un debate que ha concluido con la decepción de la Asociación de Empresarios del puerto.
Llegar a un acuerdo sobre qué nuevas estructuras serán montadas una vez finalizados los trabajos ha sido un proceso complejo cuya resolución no satisface a esta entidad dado el rechazo a sus anteriores propuestas sin explicaciones, según afirman.
«Estos últimos meses se han llevado a cabo reuniones en las que nos dieron a entender que teníamos derecho a dar nuestra opinión y a que fuera valorada», comentan y lamentan que al final la definitiva sea la que promulga la Comisión de Patrimonio del Ayuntamiento. «¿Quién decide en Ciutadella?», se preguntan.
Esta organización profesional indica que siempre ha estado «abierta al cambio», con intención de «colaborar para que el puerto mejore en todos los sentidos» y que está totalmente a favor de mejorar la imagen estética, así como liberar la muralla de todo tipo de instalaciones y, por ello, muestran una gran decepción sobre como han transcurrido los últimos meses.