El Aeropuerto de Menorca ha cerrado el mes de septiembre con un balance de 492.504 pasajeros, lo que supone un descenso del 4,5 por ciento en relación al año 2018. Son 23.027 viajeros menos en la que representa la mayor pérdida de pasajeros en el último mes del verano de los últimos 15 años. El efecto de la quiebra del turoperador británico Thomas Cook ha contribuido en gran medida al descenso en el tráfico de pasajeros desde aeropuertos del Reino Unido, del 9,8 por ciento, 17.899 viajeros menos.
La crisis del mercado británico se ha cebado especialmente con el Aeropuerto de Menorca, mientras que ha tenido consecuencias menos considerables para el resto de aeropuertos del archipiélago balear. En el aeropuerto de Son Sant Joan (Palma) se han perdido 12.473 británicos, un 1,56 por ciento en relación al año pasado, mientras que en el aeropuerto de Eivissa, la pérdida ha sido de 15.860 pasajeros, lo que en términos relativos supone una caída del 4,7 por ciento.
El balance en el movimiento de pasajeros británicos no solo se ha resentido directamente por la pérdida de pasajeros de la aerolínea de Thomas Cook, que tras cesar operaciones el 23 de septiembre ha visto como en la comparativa anual pierde 8.165 pasajeros, un 26,7 por ciento. También el turoperador TUI, parte de cuya operativa con la Isla se llevaba a cabo con aviones del grupo Thomas Cook, ha perdido otros 8.217 pasajeros, un 13,9 por ciento, mientras que la low cost Easyjet ha reducido su presencia en la Isla con una pérdida de 6.770 pasajeros, un 26,7 por ciento menos.