La incógnita sobre el futuro de los puentes de Rafal Rubí y La Argentina, en el tramo entre Maó y Alaior de la carretera general, continúa. El PP intentó forzar ayer en el pleno que el equipo de gobierno aclarara cómo va a resolver la obra de la Me-1 pero de nuevo se dio contra un muro. «No se lo diré en este momento, el gobierno lo sabe pero tomaremos una decisión en función de los informes», respondió la consellera de Movilidad, Francesca Gomis, al conseller Adolfo Vilafranca, que tras no obtener respuesta satisfactoria a todas las cuestiones que rodean a la ‘general' (financiación, contrato con Inypsa, modelo definitivo con o sin puentes y reanudación de las obras) con la interpelación del pleno de septiembre, volvió a intentarlo ayer con una moción.
En ella el PP planteaba la creación de un grupo de trabajo formado por un conseller de cada grupo político y los técnicos responsables del expediente. Un grupo de trabajo en el que la oposición reclamó que se debatieran las opciones técnicas previstas y que se negociara una solución definitiva para este tramo de la Me-1 «atendiendo los criterios técnicos». Porque tanto para el PP como para el representante de Ciudadanos (C's), la paralización de la carretera es una cuestión política. «Los políticos son los que han frenado este proyecto», afirmó el conseller José Negrete, quien no obstante se abstuvo en la votación por considerar que se debe definir el proyecto y «traerlo a debate y aprobación en este pleno ante todos los menorquines», además de calificar de «imagen lamentable» la que se está dando con este tramo de la ‘general'. Vilafranca por su parte también achacó a la «injerencia política» que el proyecto todavía este incompleto. «Saben la solución, está en el expediente, que hemos solicitado hace más de 20 días, pero lo tienen bloqueado, no hay voluntad política de cerrar este asunto», acusó el conseller popular al gobierno de izquierdas, a lo que Gomis respondió que «estamos dentro de plazo» para la entrega del expediente, «han visto todo lo que han pedido, no hay nada escondido», espetó a Vilafranca, al tiempo que recordó su compromiso de presentar una propuesta de solución para la carretera «y buscar el acuerdo, no tomaremos una decisión sin ponerla en común». Pese a las buenas palabras Gomis no aceptó la propuesta popular, «no creemos en crear un grupo de trabajo», dijo, y añadió «los técnicos hacen su trabajo y nosotros el nuestro», zanjando así el debate. Sobre el contrato con Inypsa (ahora Airtificial), la empresa que debía redactar el proyecto técnico del tramo de Maó a Alaior, Gomis señaló que «estamos pendientes de informes para rescindir o no el contrato».