Unir fuerzas para impulsar el autoconsumo. Es el planteamiento de Nura Solar, el proyecto promovido por el grupo local de la cooperativa sin ánimo de lucro Som Energia en Menorca, que está buscando 50 familias o negocios que quieran dar el salto hacia la producción de energía en sus viviendas y centros de trabajo con el objetivo de ordenar una compra colectiva y concentrar medio centenar de instalaciones fotovoltaicas en una sola gestión, lo que permitirá a los socios de esta iniciativa abaratar los costes y contar con un mayor respaldo técnico y burocrático.
Después de poner en marcha un proceso de licitación, Som Energia ya ha cerrado acuerdos con dos empresas locales, Ecosis y Ona Energies, que ofrecen un precio cerrado, siempre y cuando se alcance un número mínimo de adhesiones. Por el momento ya hay 17 socios que han hecho la reserva y otros 19 han hecho la prerreserva, aunque sin aportar todavía los 150 euros que se reclaman para poder inscribirse (además de hacerse socio de la cooperativa).
La compra colectiva sigue el modelo de llave en mano, que incluye todas las fases del proceso, incluido el estudio previo de viabilidad y el asesoramiento, la instalación y legalización de las placas, la puesta en marcha y el seguimiento de la instalación, además de un periodo de garantía de cinco años. Lo explica Francesc Flo, coordinador del grupo local de Som Energia en Menorca, que desde el pasado 26 de octubre y hasta el 15 de noviembre recorrerá todos los municipios de la Isla ofreciendo charlas para animar a la población a sumarse a un proyecto que tiene precedentes en Madrid y Girona, y que en Mallorca, donde se buscaban cien adhesiones, finalmente no pudo salir adelante.
En Menorca, la idea inicial del grupo local de Som Energia fue promover un parque solar propio, a través de las aportaciones de los socios, que permitiese tener acceso a la energía renovable a particulares que tienen más dificultades para instalar placas en sus inmuebles; sin embargo, por el momento esa opción se ha descartado, ante las dificultades financieras de una cooperativa. Ahora se ha optado por el proyecto Nura Nova.
Coste y ahorro
El proceso para sumarse a la iniciativa implica una aportación inicial de 150 euros (se devuelven si finalmente no es viable la colocación de placas). El coste de una instalación estándar en una vivienda es de poco menos de 4.000 euros y supone ahorros de alrededor de un 30 por ciento en la factura de la luz, por lo que se calcula que en menos de una década la inversión ya habrá sido amortizada.