La futura Ley de Consells da mayor peso político a los ejecutivos insulares, que podrán actuar –de hecho– como órganos de la comunidad autónoma y deberán asumir una estructura similar a la del Govern de las Islas.
Sin embargo, también se fortalecerán algunas competencias del pleno (que seguirá presidiendo la presidenta o presidente insular) y, aunque no llegará a los extremos que tiene el Parlament, sí que asumirá funciones de control que ahora se le escapan. Por ejemplo, estrenará nuevas figuras de control y fiscalización, entre ellas la opción de crear comisiones de investigación.
La última gran reforma de la Ley de Consells –que desmontó toda su estructura anterior y creó una nueva a propuesta del partido Unió Mallorquina y de Maria Antònia Munar– es del Pacte de Progrés.
El anteproyecto de ley mantiene todas las competencias que obtuvieron los consells, añade otras y extiende el control a los organismos del llamado sector público. Es decir, los consorcios y empresas públicas.
Comisión de Secretarios
El texto elaborado en la Conselleria de Presidencia del Govern ha recibido ya el visto bueno de la Abogacía de la Comunitat Autònoma y ha sido remitido a los consells para que hagan sus aportaciones e introduzcan novedades. También será revisado por los servicios jurídicos. El PSOE preside ahora tres de los cuatro consells. Sólo en el de Eivissa existe una mayoría diferente a la del Parlament.