El GOB de Menorca ha solicitado este viernes a la Conselleria de Medio Ambiente que se incentive la pesca profesional de cangrejo azul y la promoción como producto gastronómico como medida de control de la población de esta especie que, tal y como han apuntado, se considera una de las especies más invasoras del Mediterráneo.
Desde la organización han explicado que el cangrejo azul se detectó por primera vez en el año 2017 en Menorca y, según han remarcado, ya se pueden encontrar en diferentes zonas de la costa de la isla como las calas del sur, Es Grau, Port d'Addaida o las playas de Algaiarens.
Los ecologistas han subrayado que esta especie puede llegar a tener más de 20 centímetros de ancho y es "muy agresivo". En este punto, han señalado que "impacta de manera importante los ecosistemas que coloniza".
El cangrejo azul come crustáceos, moluscos, peces y algas y vive siempre cerca de la costa, a menos de dos metros de profundidad, sobre todo en desembocaduras de torrentes, donde hay una mezcla de agua dulce y salada.
Se ha calculado que cada hembra puede poner entre uno y dos millones de huevos y las larvas viven en el plancton de manera que son dispersadas por las corrientes marinas. "Es casi imposible erradicar esta especie una vez han colonizado un territorio", han concluido desde el GOB.