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Catorce fincas de la zona de Rafal Rubí reclaman otro proyecto

Alegan para que el Consell no ‘corte' los caminos rurales al prohibir accesos directos

En la alegación no defienden el puente de Rafal Rubí pero sí los caminos rurales | Josep Bagur Gomila

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Catorce fincas rurales de la zona de Rafal Rubí han presentado una alegación al Consell para que se revise la solución dada al cruce con la carretera general, que consiste en prohibir los giros a la izquierda mediante una línea continua. Algunos de sus argumentos han sido escuchados por Junts per Lô, que esta semana ha pedido que se busquen alternativas para el cruce. Los propietarios destacan especialmente que los caminos rurales de Sant Climent, de Torralba y Camí d'en Kane quedan interrumpidos con el proyecto del Consell, lo que perjudica a la red viaria secundaria, que tiene usos importantes e interés económico.

«Prohibir el problema»

Los propietarios de estas fincas afirman que el Consell en lugar de solucionar un problema en este cruce, lo que hace es «prohibir el problema». Aseguran que algunos de los propietarios que ahora firman la alegación estaban en contra de la rotonda soterrada y a favor de la demolición del puente, pero que ahora no comparten la solución que ha aprobado el Consell.

Por eso piden que se busquen alternativas. Reconocen que no les corresponde a ellos plantearlas, pero afirman que existen otras opciones válidas y se refieren a que algunas de ellas se han aplicado a la reforma concluida del tramo Ciutadella-Ferreries, donde sí se han ordenado giros a la izquierda en condiciones de seguridad vial. En su alegación, recuerdan que el acceso directo a estos caminos «ha existido siempre» y advierten de las consecuencias económicas que pueden derivarse de una solución técnica que no comparten. De esta forma, dan la vuelta a un argumento utilizado en su día por el Consell para proponer la demolición del puente de Rafal Rubí, la proximidad de las navetas de la época talayótica y el impacto visual. Dicen los propietarios que la dificultad para acceder a este recinto arqueológico puede perjudicar el proyecto de Menorca Talayótica, al poner obstáculos a la visita a la zona.

La solución más insegura

Las catorce personas que presentan esta alegación consideran que la solución de la línea continua «es la más insegura de las que se podían contemplar» y que «choca frontalmente con el objetivo principal de la reforma de la carretera general, la seguridad de los conductores» y añaden que «el incumplimiento es muy fácil y peligroso». También apunten que la distancia para cambiar el sentido en las rotondas de L'Argentina y del Aeropuerto, es excesiva.

Los dueños que firman la alegación corresponden a las fincas: Binifaell Nou, Santa Isabel, Alcaidús d'en Fàbregas, Alcaidús de Dalt, Alcaidús d'en Carreras, Rafal Rubí Vell, Algendar d'en Gomila, Son Orfila, Montpler, Alcaidusset, Alcaidusset Petit y el agroturismo Rafal Rubí, además de dos pequeñas fincas.

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