La Conselleria balear de Transición Energética, a través de l'Institut Balear de l'Energia (IBE), ha sacado a licitación la redacción del proyecto técnico para cubrir con pérgolas fotovoltaicas el aparcamiento público de mayores dimensiones de la Isla, el que da servicio al Hospital Mateu Orfila, que se convertirá en la mayor instalación de autoconsumo de Menorca, por delante de la ubicada en el parking del aeropuerto. A la espera de la definición del proyecto, se estima que se cubrirán 350 plazas de estacionamiento con una potencia de 2,5 kilovatios pico por plaza, por lo que se alcanzará una potencia pico de 875 kilovatios.
Para poner en contexto la potencia que tendrá la instalación hay que tener en cuenta que la mayor instalación hasta el momento, la del aeropuerto, tiene 500 kilovatios de potencia. La segunda mayor instalación es actualmente la inaugurada precisamente en la cubierta del hospital menorquín en el año 2019, con unos 390 kilovatios de potencia, por lo que el ‘Mateu Orfila' contará para su autoconsumo con una potencia instalada superior al megavatio.
Las empresas que quieran optar a la redacción del proyecto técnico y al estudio de seguridad y salud, así como al seguimiento de la obra tienen hasta el 21 de enero para presentar sus ofertas. El director gerente del Institut Balear de l'Energia, Ferran Rosa, explica el calendario sobre el que trabajan. La previsión es que entre la redacción del proyecto y la ejecución de las obras, la nueva planta de autoconsumo sea una realidad en el plazo de un año, antes de que termine el año 2021.
La producción eléctrica de las pérgolas permitirá reducir algo más de un 20 por ciento la factura eléctrica del hospital menorquín, que con una demanda aproximada del 1,5 por ciento del consumo anual de la Isla, se trata de uno de los mayores consumidores de electricidad de Menorca. Cabe recordar que la instalación en funcionamiento ya reduce casi un diez por ciento la factura.
La contratación de la redacción del proyecto, que incluye la provisión de nueve puntos de recarga para vehículos eléctricos, tiene un coste de salida de casi 72.000 euros. Y el Institut Balear de l'Energia tiene una partida de 2,6 millones de euros para ejecutarlo, aunque no prevé ni mucho menos agotar ese presupuesto. Esa partida resulta de la cantidad que tenía asignado el organismo instrumental del Govern del reparto de la ecotasa para dos proyectos de transición energética que se han caído con la llegada de la pandemia y se han redirigido a la implantación de renovables en cetros hospitalarios públicos.
La actuación en el aparcamiento del ‘Mateu Orfila', burocráticamente más sencilla por cuanto es de titularidad pública, será el proyecto de mayor envergadura de los que gestionará el IBE a lo largo del año 2021 y apuntala a Menorca en la posición de cabeza de la transición balear.