El edificio que actualmente alberga las Casas Consistoriales de Ciutadella y el Bastió des Governador ha vivido diferentes etapas lo largo de su historia. Se tiene constancia documental de que su base es el Real Alcázar, levantado durante la época islámica. Una construcción que con el paso de los siglos, los acontecimientos y las ocupaciones ha ido tomando una nueva estructura arquitectónica. Su raíz islámica acaba de aflorar gracias a las obras que se están realizando desde hace unos meses en el Ayuntamiento. Fruto de las mismas se han encontrado muros que ya se intuían de esa época, origen que ahora se ha confirmado con la aparición de restos de cerámica.
La arqueóloga municipal, María José León, explica que actualmente se está llevando a cabo un estudio en más profundidad. En ese sentido, señala que era de esperar que aparecieran este tipo de restos ya que en los archivos se custodia información escrita, «aunque no muy extensa», del origen islámico del edificio, en el que ahora también están aflorando estructuras habituales de esa época.
El hallazgo ha tenido lugar durante la intervención llevada a cabo donde antes se encontraba la Oficina d'Atenció al Ciutadà (OAC) y tiempo atrás tenía su sede la Policía Local. En cuanto al uso que hace siglos se le daba a las dependencias que ahora están siendo estudiadas, León asegura que todavía es pronto para saberlo.
La aparición ha alterado inevitablemente el proceso de ejecución de la rehabilitación. José López Bosch, concejal encargado de Obra Pública, avanza que el orden de actuación es el siguiente: «Descubierta, catalogación y reposición».
Con el propósito de que el nuevo escenario afecte lo mínimo al proyecto, que arrancó a finales del pasado año, la empresa adjudicataria ha contratado por su cuenta otro arqueólogo para que los trabajos avancen a un mayor ritmo.
El departamento de Patrimonio y Cultura del Consell insular ha sido informado y ya ha visitado las dependencias. Actualmente se está procediendo a los trabajos de catalogación y generando imágenes en 3-D para que los elementos puedan ser exhibidos posteriormente. Una vez finalizadas esas tareas, se seguirá con la planificación de las obras, aunque según informa el concejal no se descarta preservar alguna zona protegida con un acristalamiento para que pueda ser contemplado de forma permanente.
En lo que se refiere a las actuaciones que se están llevado a cabo en la zona exterior del edificio, ya se puede comprobar visualmente cómo está cambiando la fisionomía del mismo en la cara norte, la que mira al puerto. López informa de que ya se han eliminado diferentes cuerpos y elementos estructurales que se habían añadido al edificio original. Cabe recordar, que una de acciones estrella de la intervención es la de abrir un paso por esa parte del Ayuntamiento para que sea posible rodear todo el recinto en un paseo a pie.