El Consell da un paso más en la modernización de las Estación de Autobuses de Maó con las obras para construir los nuevos baños. Se calcula que un millón de pasajeros pasan cada año por este edificio, lo que ha supuesto el deterioro de las instalaciones actuales, al tiempo que se requiere adaptarlos para personas con movilidad reducida.
El Departamento de Movilidad ha iniciado los trabajos que trasladan los baños a uno de los espacios de la planta baja que en principio estaba reservado para un local comercial pero que nunca ha llegado a ocuparse. El presupuesto de la actuación es de 55.000 euros y se estima un plazo de ejecución de tres meses.
La consellera de Movilidad, Francesca Gomis, visitó ayer la estación acompañada por el alcalde, Héctor Pons, el director insular de Transportes, Damià Moll, y el concejal Manuel Lora.
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