Dieciséis asociaciones de padres y madres de alumnos de Menorca reclaman a las administraciones que concreten y unifiquen de una vez los protocolos a seguir en caso que la covid entre en las aulas. Y es que, denuncian, los criterios dispares y cambiantes en cada ola crean «indefensión» y, lejos de mejorar, la situación «empeora día a día».
En una carta que este jueves se publica íntegramente en la sección de Opinión, apimas de centros de infantil, primaria y secundaria de Maó, Alaior, Es Castell, Sant Lluís y Es Migjorn Gran hacen una serie de reivindicaciones ante «la falta de coordinación, adecuación y coherencia de las medidas adoptadas por las diferentes instituciones competentes», lo cual genera «situaciones insostenibles». Y es que, añaden, en el momento «imprevisible» que llaman del colegio para informar que un hijo debe quedar confinado, empieza la particular odisea familiar para «afrontarlo como buenamente se puede y sin ningún tipo de derecho o cobertura legal». Es ahí donde empiezan los malabares para compaginar el trabajo con el cuidado de los hijos. De hecho, puede haber tantas fórmulas como familias: con los abuelos no conviene, por lo tanto, los padres optan por pedir días sin sueldo, consumir vacaciones, teletrabajar, cerrar el negocio o cesar la actividad en caso de autónomos, rogar una baja al médico de cabecera o, incluso, tener que dejar a menores solos en casa. «Soluciones muchas veces surrealistas», definen.
Grupos confinados
Al menos diez aulas están confinadas en estos momentos en la Isla según los datos que manejan estas apimas. Solo en Sa Graduada, enMaó, seis de sus ocho grupos de primaria lo están y, ayer mismo, se confirmó el positivo de un alumno del CEIP Joan Benejam, en Ciutadella, que obligó a mandar a casa a toda la clase. Así, solo que haya diez grupos, a razón de veinte alumnos en cada uno, son «doscientas familias las afectadas» en una semana. «La situación es desesperante», acuñan los padres, aún más teniendo en cuenta que los niños no están vacunados.
En este contexto, las familias consideran «extremadamente urgente» la necesidad de adopción de «medidas eficaces, realistas y palpables, más allá de la campaña de vacunación a los niños, ya que la situación empeora día a día».
Es más, desde que estalló la crisis sanitaria, públicamente y de forma privada a través de cartas al Gestib las administraciones «nos han pedido responsabilidad». «Y creemos que lo hemos sido», eso sí, quién quiera conciliar «lo ha de pagar de su bolsillo», por las reducciones horarias, escuelas matineres o comedores contratados.
Este jueves, reunión con Salud
El delegado de Educación en la Isla, Joan Marquès, admite lo lentas que son a veces las comunicaciones de positivos, algo que se produce por la «sobresaturación» en la gestión. Para este mismo jueves está prevista una reunión entre Educación y el Área de Salud de Menorca, «para corregir los retrasos» y también «para tratar cuestiones de funcionamiento».
Sobre los protocolos, «Educación sigue los criterios que indica Salud», y aseveró que «se añade la dificultad de Educovid de atender las casuísticas por posibles positivos». Por otro lado, Marquès afirmó que «entiendo a las familias y estamos de su parte por sus reivindicaciones», pero también apuntó que los criterios «a veces chocan» con otras peticiones de padres, como las de los partidarios de eliminar las mascarillas.
En cuanto al número de aulas confinadas, un error en la gestión de datos de Educovid impedía todavía este miércoles a la Consellería de Educación informar sobre el número de aulas confinadas.