Las ayudas de la nueva Política Agraria Común (PAC) para el periodo 2023-2027, reportarán para el campo de Menorca un incremento sustancial de las subvenciones. El Govern aún no tiene una estimación exacta, pero de entrada llegará un 63 por ciento más, pasando de 2,06 a 3,36 millones de euros para los 17.827 derechos consolidados (hectáreas que perciben la PAC). Una cifra que crecerá en función de distintos conceptos.
La mejora de las ayudas es por el reconocimiento, por primera vez, del factor de insularidad. El Plan Estratégico Nacional, que el Ministerio de Agricultura presentará en Bruselas a finales de mes, compensará al sector. Tan es así que los payeses baleares percibirán, de base, 188,64 euros por hectárea, o sea, un 50,38 por ciento más (63 euros) que los 125,44 euros que ingresará un agricultor peninsular. Cifras que voltean las actuales, donde los isleños perciben 117,96 euros, 26,31 menos que en la Península.
El valor medio de las ayudas crecerá un 60 por ciento, con un importe medio por perceptor que pasará de 2.575 a 4.118 euros y llegarán a las Islas un mínimo de 23 millones al año, 8,6 más que ahora.
Más cambios y mejoras
Hasta ahora solo podían acogerse a las ayudas los agricultores profesionales, lo que dejaba fuera a los que no viven exclusivamente del campo. Es algo habitual en Balears y que se ha logrado introducir en la nueva PAC. Así, se reconoce la pluriactividad y serán considerados «agricultores genuinos» aquellos cuyos ingresos procedan, al menos en un 25 por ciento, de la actividad agrícola o ganadera.
Por otro lado, las pequeñas y medianas explotaciones recibirán pagos redistributivos. Hará que el 85 por ciento de las fincas de Balears incrementen el valor de sus derechos de ayuda básica, en dos tramos: las fincas hasta 5,53 hectáreas recibirán 37,73 euros por hectárea, y las que tengan hasta 23,05 hectáreas, ingresarán 75,45 euros.
También se incrementarán las subvenciones por la ampliación de derechos consolidados. Hoy afecta a 17.827,36 hectáreas y a partir de 2023 serán 11.067 hectáreas más. Así, los agricultores que demuestren que trabajan más tierras, podrán solicitar esos derechos.
El relevo generacional es una preocupación en el sector primario, de ahí que los jóvenes que se incorporen a la actividad agraria tengan prioridad para la solicitud de derechos. Los cinco primeros años percibirán 377,28 euros por hectárea (hasta 100), y las mujeres jóvenes recibirán un 15 por ciento adicional (28,29 euros) sobre el valor medio del derecho regional.
El Plan Estratégico Nacional, ahora en exposición pública antes de su remisión a la Comisión Europea, incluye la incorporación de hectáreas para pastos y las ayudas asociadas se incrementarán, por ejemplo un 20 por ciento, en las granjas lecheras. Por último, faltan por concretar las subvenciones para prácticas agrícolas sostenibles.