La asociación de padres de niños con trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) de Menorca está desbordada. En sus inicios había inscritas menos de diez familias con menores diagnosticados con TDAH. Actualmente hay 30 afiliados y las solicitudes para adherirse a esta entidad no cesan. Así lo aseguró este martes su representante, Tomeu Pons, en una rueda de prensa en la que también estuvo presente la consellera de Bienestar Social, Bàrbara Torrent.
El motivo de la convocatoria fue anunciar la puesta en funcionamiento de un proyecto piloto en la Isla para dar visibilidad y atender a una demanda cada vez mayor de familias con niños y adolescentes con TDAH. Esta iniciativa, que se prevé tenga una duración de un año escolar, consiste en la prestación de un nuevo servicio que permite abordar los problemas de conducta de los niños y adolescentes diagnosticados con dicho trastorno.
«Las personas con comportamientos inadecuados generan un malestar importante en su entorno y en sí mismos, y tienen un mayor riesgo de sufrir rechazo social y se reducen sus oportunidades de participar en la sociedad», explicó Bàrbara Torrent. Por este motivo, la asociación de padres de niños con TDAH y el Consell, junto con la colaboración de la Fundación NEMO y el Centro Arrels, han firmado un convenio que permitirá poner a disposición del profesorado, las familias y los propios menores un conjunto de técnicas de aprendizaje para mejorar la capacidad de atención e integración de los alumnos con dificultades en el aula.
Para el desarrollo de este programa se ofrecerán sesiones individuales dirigidas por un profesional de la neuropsicología con los padres y madres de los niños y adolescentes con TDAH. Estas sesiones tendrán una duración de una hora y una frecuencia semanal, aunque las previsiones pueden variar en función de las necesidades de cada caso. Gracias al convenio, el ente insular garantizará una bonificación de 10 euros por sesión, hasta un máximo de 1.500 sesiones. El resto correrá a cargo de las familias.