Las personas mayores son cada vez con más frecuencia el objetivo de ladrones y criminales que no dudan en aprovecharse de su vulnerabilidad para cometer robos, hurtos, estafas y otros delitos similares contra ellos. Aparte, constituyen uno de los grupos de población más maltratados en los últimos años por razón de edad.
Según recientes investigaciones de la Organización Mundial de la Salud, las tasas de este tipo de violencia en la vejez que se comete en la comunidad y en las instituciones son elevadas y han aumentado durante la pandemia. Los mismos estudios prevén que este problema irá a más en muchos países debido al rápido envejecimiento de la población.
Proyecto en Menorca
Consciente de la especial vulnerabilidad de las personas mayores, Cruz Roja desarrolla proyectos en la Isla para prevenir, sensibilizar y visibilizar esta realidad. El pasado viernes 21 ya organizó, junto con el Club de Jubilados de Sant Lluís, un taller de prevención de robos y estafas en el municipio, ante el auge de los delitos tradicionales y los vinculados a las nuevas tecnologías.
La organización también contempla planificar actividades para fomentar el buen trato a las personas mayores, tal y como ya hace desde cinco años en Mallorca. «Queremos atender esta problemática, porque merece y necesita la atención de toda la sociedad», explica Deyana Mihaylova, responsable autonómica del área de personas mayores, con discapacidad y cuidadoras de Cruz Roja.
En Menorca, indican desde la organización, no se han notificado casos de maltrato , «pero esto no significa que no los haya», aclara Mihaylova. Con este proyecto pretenden, precisamente, detectar perfiles vulnerables y que ellos mismos se reconozcan como víctimas.