El Govern balear, a través de la Conselleria de Medio Ambiente y Territorio, autorizó la matanza de cabras en el área de Mongofra que este miércoles publicó MENORCA «Es Diari». Según indica la administración, el descaste fue llevado a cabo por miembros del Consorcio para la Recuperación de Fauna de las Illes Balears (Cofib), que abatieron a decenas de estos animales en el Parque Natural de S’Albufera des Grau a petición de los propietarios de las fincas de la zona, que solicitaron ayuda a la Conselleria para reducir el impacto de estos ungulados presentes en Favàritx y alrededores.
Los dueños de los terrenos, especifican desde el departamento de Medio Ambiente y Territorio del Govern balear, denunciaron que las cabras asilvestradas «estaban dañando los cultivos y las paredes, con los perjuicios económicos que esto conlleva», y autorizaron a la administración a realizar el control de la especie. Recuerdan desde el Ejecutivo autonómico que la reducción de la densidad de estos ungulados en las islas se realiza por «personal especializado, con medios autorizados y efectivos para evitar el sufrimiento de los animales».
«No existe una alternativa»
Los descastes de cabras con armas de fuego constituyen, insisten desde Medio Ambiente y Territorio, «el método más efectivo y menos dañino para los animales» y que, en estos momentos, «no existe una alternativa técnicamente viable». Además, subrayan que llevan a cabo estas acciones con la finalidad de «preservar los ecosistemas y la biodiversidad de Balears, tanto en fincas públicas como privadas». La presencia de la cabra doméstica asilvestrada sin ningún tipo de control sanitario, justifican, «no es solo un problema de conservación, sino una prioridad sanitaria».
Añaden, en este sentido, que la existencia de estos ungulados no solo pone en peligro la flora y fauna del entorno protegido, sino también los cultivos y rebaños de los payeses. «En Menorca actuamos a petición de ayuntamientos y, sobre todo, de particulares», aclaran desde el Govern balear. También explican que dejan los restos de los animales muertos en la zona para que sirvan de alimento a carroñeros «sin ningún tipo de perjuicio al medio ambiente».
El apunte
«Actuamos cuando son una amenaza para los payeses y la biodiversidad»
Ante la denuncia de unos excursionistas que hallaron una veintena de cabras muertas en el entorno natural de Mongofra, el Govern balear confirma que los animales fueron abatidos tras uno de los controles efectuados en el Parque Natural de S’Albufera des Grau, argumentando que «actuamos cuando estos animales suponen una amenaza para los payeses y la biodiversidad, siguiendo la normativa». Recuerdan, en este sentido, que se trata de cabras domésticas que, en algún momento, fueron abandonadas en medio de la naturaleza, dejando de recibir seguimiento sanitario.
«Además de poner en riesgo la flora y fauna del espacio protegido, ponen en peligro los cultivos y rebaños de las fincas», aseguran, aunque aclaran que, actualmente, estos ungulados no representan un problema grave en Menorca. Asimismo, explican que el control de población de cabras varía en función de la zona donde estén, la biodiversidad que haya y el grado de protección.