La ampliación del centro de salud Canal Salat en Ciutadella sigue sin definirse y las condiciones urbanísticas de la parcela no se han modificado, por lo que crecer en altura –una vez descartada por Salud la construcción de un segundo centro de nueva planta–, es la opción más probable. Al mismo tiempo la idea de construir otro piso no gusta al equipo directivo porque las obras afectarían a la actividad sanitaria, e incluso deberían desalojarse consultas mientras duraran las mismas.
La Conselleria no desvela todavía el proyecto, a preguntas de este diario solo responde que aún se están elaborando los informes necesarios y que un arquitecto se desplazó recientemente al centro para estudiar cómo acometer el plan funcional, pero lo cierto es que ya ha pasado año y medio desde que se anunció la necesaria ampliación y no se ha acometido ninguna modificación urbanística para que se haga realidad. Ni el Plan General vigente, el de 1991, ni el revisado y aprobado inicialmente en 2018 y que sigue pendiente de aprobación definitiva, dan una solución al problema de falta de espacio para crecer en la ubicación actual de Canal Salat, cuya parcela está al límite de la edificabilidad permitida.
El teniente de alcaldía de Servicios Económicos y Urbanismo,José López, ratifica en declaraciones a «Es Diari» lo que ya dijo en mayo de 2022, que hay «poco margen» para ampliar el edificio en superficie, y asegura que no ha habido contactos con la Conselleria de Salud para abordar cualquier cambio. «La modificación del Plan General» para posibles recalificaciones de terreno en la zona «no se ha planteado, no se ha profundizado en esa cuestión», señala. Y añade que cuando la revisión del PGOU se llevó a cabo y se aprobó inicialmente «nadie habló de la ampliación de Canal Salat en aquel momento», así que el nuevo planeamiento tampoco da soluciones a la ampliación del equipamiento sanitario actual «no contempla cambios en el suelo de esa zona, solo ajusta la calificación del aparcamiento a la realidad de su ocupación, pero nada más», explica López.
Por su parte la alcaldesa, Joana Gomila, confirma que no ha habido ninguna petición del IB-Salut para desbloquear la situación urbanística ni ningún contacto, más allá del encuentro que mantuvo con la consellera de Salud, Patricia Gómez, en agosto de 2021 cuando esta visitó las instalaciones y anunció el plan funcional y la ampliación.
«Nosotros no poníamos sobre la mesa una opción u otra (construir un nuevo centro o reformar el existente), solo expusimos la necesidad que tenemos de ampliar servicios, lo necesitamos, creo que eso es evidente porque somos el municipio más poblado de la Isla», pero añade que no se han mantenido más reuniones.
Por otro lado, el sindicato médico Simebal tampoco ha sido informado de avances en Canal Salat.Su delegado en Menorca, Claudio Triay, mantiene que su postura «siempre ha sido la misma, vemos difícil ampliar y apostamos por un edificio nuevo, un centro de alta resolución».
La visita del técnico de la Conselleria de Salud a Canal Salat se produjo la pasada semana y tras el intercambio de impresiones con el coordinador del centro, Francisco Sánchez Cabrera, este informó a los médicos de las dificultades para ampliar el centro según la idea original del plan funcional, que duplica espacio.
El apunte
El debate sobre el retraso y la opción de un nuevo centro vuelve al Parlament
El Partido Popular insistirá en el pleno del Parlament del próximo martes en la necesidad de construir un segundo centro de salud para descongestionar el actual. En noviembre de 2021 ya registró una Proposición no de Ley de la diputada Asunción Pons que se debatió en la Comisión de Salud en marzo de 2022 y que fue rechazada por los grupos de izquierda. Ahora esta misma diputada ha registrado una batería de preguntas al Ejecutivo balear sobre las previsiones de ampliación de Canal Salat y la partida asignada en 2023 para iniciar dicho proyecto. La inversión comprometida ascendía a 7,7 millones de euros. Asunción Pons recuerda las particularidades de los terrenos en los que se halla el actual centro de salud y que dificultan la ampliación, cerca de un torrente y por tanto una zona inundable, y con otros usos, el parking y una zona verde. El PP siempre ha apostado por construir un centro de nueva planta y contar con dos equipamientos para una población que en 2021 ya alcanzó los 30.638 habitantes.