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La dimisión de todos los coordinadores de Vox abre su crisis más grave antes de las elecciones

La dirección elige a dos no residentes para optar al Consell y Ciutadella, una de ellas, y la otra como número 2 en Maó

A la izquierda, Melina Merki, que irá de número 2 en Maó, Xisco Cardona, número uno, y Maite de Medrano, al Consell y a Ciutadella. | TWITER VOX

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La anunciada renovación de los coordinadores de Vox en Menorca ha pretendido encubrir una crisis abierta en el partido a partir de las decisiones que ha tomado su nuevo responsable, Xisco Cardona, hasta provocar la dimisión de los delegados locales, a solo 90 días de las elecciones.

Ha generado rechazo entre ellos que Cardona haya formado su núcleo duro relegando a quienes habían estado construyendo el partido en Menorca desde hace cinco años. Con ese propósito ha incorporado a dos mujeres que residen en Palma y Madrid para optar al Consell y a los ayuntamientos de Maó y Ciutadella. Maite de Medrano Olives, arquitecta, encabezará la lista al Consell y a Ciutadella, y Melina Merki, abogada, irá de número 2 al Ayuntamiento de Maó, por detrás del propio Cardona con quien comparte despacho profesional en Palma, explican algunos de los dimisionarios, aunque sus candidaturas aún no han trascendido. Todos conocieron las intenciones del coordinador general en la reunión del pasado 27 de enero en la sede del partido, en Maó, que ha acabado provocando la ruptura interna.

Cardona ha elegido a los nuevos coordinadores de cada agrupación, como hizo público el viernes, pero estos nombramientos se habían visto forzados por la renuncia que habían presentado por escrito, tres días antes, Josefa Rueda y Eva María Tejedor, de Alaior, Bartolomé Torres, de Ciutadella, Félix José Farfán, de Maó, María Dolores Pulido, de Es Castell, y Alejandro Llabrés, de las juventudes del partido.

Empadronada en casa de otro cargo del partido

Además, la presidenta balear, Patricia de la Heras, comunicó el viernes el cese a Claudia Patricia Villalobos, residente en Ciutadella, que era la vicesecretaria balear de relaciones institucionales, al considerar que estaba al frente de este movimiento contestatario. Villalobos había aceptado en diciembre que Maite Medrano se empadronara en su casa para poder presentarse al Ayuntamiento de Ciutadella, agrupación de la que ahora es su coordinadora, y también como número uno al Consell.

«No puede ser que el partido en la Isla quede en manos de tres personas que viven fuera», explicó ayer la propia Claudia Patricia Villalobos, junto al excoordinador de Maó, Félix José Farfán.

Los seis dimisionarios, en una misiva dirigida a la presidenta balear a la que ha tenido acceso MENORCA • «Es Diari», esgrimen su desacuerdo con las decisiones adoptadas por Cardona, desde que este asumiera el cargo tras la renuncia obligada de Antoni Camps.

En declaraciones a este diario, han ido más allá señalando que Cardona ha querido formar un equipo «a costa de destruir lo que ya había construido». Incluso algunos de los coordinadores locales ya habían grabado el primer vídeo promocional de la campaña frente a sus respectivos ayuntamientos. Cuestionan el excesivo «protagonismo» del nuevo responsable del partido y denuncian la pérdida paulatina de afiliados.

Xisco Cardona rehusó ayer hacer valoraciones al respecto de esta crisis y se remitió a la nota de prensa que envió el partido el pasado viernes anunciando los cambios.

El apunte

El partido tuvo más votos en las elecciones generales que en las locales

Vox aspira en las próximas elecciones municipales y autonómicas a conseguir representación en alguna de las corporaciones locales o en el Consell, lo que no ha conseguido hasta el momento, como sí ha sucedido en Mallorca.

Vox ha obtenido mejores resultados en las elecciones generales puesto que ha sido capaz de reunir 4.000 votos en la Isla que sirvieron a su líder nacional, Santiago Abascal.

Su nuevo coordinador en la Isla, Xisco Cardona, dijo tras su nombramiento que el partido tenía «posibilidades reales» de conseguir por fin representación en las locales «e incluso dar algún susto a otras formaciones políticas», porque, asegura, hay hastío por el catalanismo y por el turnismo político.

El techo de los últimos comicios al Consell fue de 1.205 votos que no le bastaron para alcanzar el escaño que sí obtuvo Ciudadanos con 1.500 votos más.

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