El Plan General de Aprovechamiento y Optimización de Aguas Regeneradas con Destino al Regadío de Balears, contempla la construcción de una charca en Es Castell. Se trata de una inversión de 3,5 millones de euros, con el objetivo de ganar capacidad de almacenaje de agua que pueda utilizarse en explotaciones agrarias.
En realidad, este proyecto fue declarado de interés general en la Ley 53/2002, de 30 de diciembre. Luego, en 2009, el Govern compró unos terrenos junto a la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Maó-Es Castell, con un desembolso de 3,5 millones de euros. Son 62.728,8 metros cuadrados, donde «inicialmente solo se construirá una balsa». Posteriormente, «si finalmente la calidad del agua, en cuanto a la salinidad, baja a los límites admisibles, se podrá llevar a cabo el proyecto completo de aprovechamiento de las aguas regeneradas de Es Castell», reza el plan presentado por la Conselleria de Agricultura, Pesca y Alimentación.
Primer paso
Para hacer realidad el embalse se prevé un terraplén necesario de 52.300 metros cúbicos, con una altura máxima de 7 metros y un perímetro de coronación de 731 metros. A partir de ahí, si los niveles de salinidad son adecuados, se instalará una estación de bombeo y filtraje, para impulsar el agua procedente de la balsa de regulación hasta las parcelas regantes.
La instalación deberá contar con un sistema de riego con telecontrol, para que los regantes puedan disponer del caudal y la presión de agua necesaria; así como de un almacén, un centro de control y reuniones, ubicados junto a la estación de bombeo que provee a la red hidráulica, a pies de la charca.
Este proyecto en Es Castell se suma al otro concerniente a Menorca, que está incluido en el Plan de Aprovechamiento de Aguas Regeneradas del Govern. Es el que se anunció meses atrás y que se ejecutará en Sant Lluís, con una inversión de 4.250.000 euros, para captar el agua procedente de la EDAR santlluïsera y que incluirá una planta fotovoltaica para alimentar las estaciones de bombeo.
El apunte
Agricultura invertirá 60 millones en seis nuevas infraestructuras en el Archipiélago
El Plan General de Aprovechamiento y Optimización de Aguas Regeneradas para el regadío, que ha elaborado la Conselleria de Agricultura, Pesca y Alimentación, contempla la inversió de 60 millones de euros para hacer realidad seis nuevas infraestructuras entre los años 2023 y 2027.
Este plan tiene como objetivo prioritario adecuarse a los planes hidrológicos, tanto nacional como autonómico, y aumentar un 33 por ciento la capacidad de almacenaje de agua regenerada. De este modo, se pasaría de destinar un 42 a un 60 por ciento del agua recuperada para usos agrícolas, en 2027. Así lo señala el director general de Agricultura, Fernando Fernández, para quien «en un contexto de cambio climático, debemos sustituir las fuentes convencionales de agua, por no convencionales como la regenerada», pues «es imprescindible para producir alimentos» y «es una cuestión estratégica para incrementar la soberanía alimentaria». Este plan prevé, así, invertir 7,75 millones en Menorca, entre Sant Lluís y Es Castell.