La antigüedad media del parque automovilístico de Menorca ha aumentado un año en el último lustro, siendo actualmente de más de doce y más de trece años, en función el municipio, tal como reflejan los últimos datos oficiales de la Dirección General de Tráfico. Si se observa solo la media de edad de los camiones, esta supera los catorce años en todos los municipios e incluso los quince en Es Castell.
El envejecimiento de los coches se percibe, por un lado, en el incremento de servicios de reparación mecánica de vehículos y, por otro, en el aumento de la demanda de coches de segunda mano, que a su vez se venden y compran cada año con mayor antigüedad. Lo que no se vende tanto en cambio son los coches nuevos. Los concesionarios de la Isla confirman que los clientes, en general, muestran asombro ante los precios de venta debido a la inflación que ha llegado a todos los sectores.
Más vehículos y más viejos
La cifra total del parque automovilístico de la Isla -con datos de finales de 2021, los últimos publicados por la DGT- asciende a 90.032, casi un vehículo por cada una de las 95.936 personas censadas en el mismo año. Por otra parte, el total de conductores residentes, 56.819, se reparte entre 30.505 hombres y 26.314 mujeres. Los turismos, el grupo más abundante de vehículos, suman 55.480 y tienen más de doce y de trece años de media mientras que las motocicletas son el grupo más nuevo, con promedios de nueve, diez y once años.
Los vehículos cada año más viejos requieren más revisiones, lo que conlleva más trabajo para los mecánicos. Francesc Benítez, presidente de la Asociación Empresarial de Talleres del Automóvil de Menorca, con 48 socios, explica que los pasados meses han tenido más volumen de trabajo. «Desde la pandemia ya no baja prácticamente la actividad en invierno, aunque en junio sigue subiendo y se desborda» dice. «El envejecimiento del parque es una causa clara del aumento de servicios. Con más años un coche tiene más probabilidad de avería».
Más carga de trabajo podría implicar más contratación de personal pero a los talleres les cuesta encontrar mano de obra, no encuentran trabajadores. «Quizá la juventud no ve atractivo este trabajo como antes. Sabemos que hay FP de electromecánica, pero no se traduce en el número de profesionales en el mercado laboral. Cuando un taller necesita un refuerzo de personal no lo encuentra» expone. «Es difícil encontrar mecánicos en invierno y más aún en verano» añade. Por otro lado, Benítez comenta que con las reparaciones de vehículos de más de diez años «hay problemas de suministro de recambios porque los fabricantes no están obligados a tenerlos en stock. Hay que buscarlos en desguaces y en Menorca hay poca opción. Lo buscamos por internet y el plazo de entrega del coche reparado aumenta y dificulta la admisión de otros vehículos para arreglar».
En los talleres perciben que «la gente aguanta el coche viejo que tiene, lo repara más. El precio de venta de los coches nuevos ha subido un 40 por ciento en cinco años y el plazo de entrega es de cinco meses o más por problemas de fabricación desde la pandemia», concluye.
Qué contamina más, un coche nuevo cambiado cada dos años y haciendo 20.000 km o un coche viejo de 10 años con 5.000 km anuales? Y lo del coche eléctrico es una estafa greenwashing, la producción de energía nunca será 100% verde, sin hablar de los materiales para la producción de las baterías y que en cada proceso de transformación de una energía a otra se pierde energía (muchas veces en forma de calor), desafortunadamente aún no han inventado un "perpetuum mobile", dicho de otra manera, de cualquiera vector energetico nunca se aprovecha el 100%...