En Ciutadella, tras concluir antes del inicio de la temporada turística la primera fase de las obras del Bastió des Governador, el Ayuntamiento está ultimando la revisión del proyecto para la segunda fase. Es así que los plazos que maneja el equipo de gobierno pasan por empezar las obras lo antes posible, a partir de 2024.
El proyecto quedó redactado durante la legislatura pasada y había recibido el visto bueno de la Comisión de Patrimonio Municipal. Es así que en estos momentos se está revisando el documento a nivel técnico, con el objetivo de aprobarlo en los próximos meses y poder iniciar los trámites para su adjudicación.
«Estará aprobado este año y queremos sacarlo a licitación entre finales de este año y principios de 2024, para que se puedan adjudicar e iniciar las obras» lo más pronto posible. Todo eso, teniendo en cuenta que el plazo de ejecución será de un año y que, como señala el concejal de Urbanismo, Joan Benejam, deberán justificar las obras, sujetas a una aportación del Govern, durante 2025.
¿Qué se hará?
La segunda fase contempla la reforma, rehabilitación y acondicionamiento de dependencias del antiguo palacio del gobernador, así como la remodelación y restauración del Saló Gòtic.
La actuación permitirá dar uso a tres salas originarias del antiguo palacio que llevan años sin recibir una utilidad. Están situadas en el lado oeste del edificio, justo detrás de la puerta del rellano de la escalera principal que sube hasta el primer piso.
A la vez, se actuará en la zona de acceso de la planta baja, restaurando los muros de marès, sustituyendo el pavimento y actuando en la escalera, donde hay brechas en la piedra.
En el exterior, se actuará para hacer visibles los trazos de los contrafuertes de la fachada sur del palacio, que quedaron ocultos por construcciones posteriores, y se contempla la consolidación de los muros, que adolecen de cortes verticales. De hecho, actualmente ya hay zonas apuntaladas.
Con las obras se reubicarán los baños públicos junto al ascensor, y en cuanto al Saló Gòtic, se actuará para resolver los graves problemas estructurales y las filtraciones que afectan al valor patrimonial de la que fuera la principal sala del Real Alcázar. Así, se repararán las grietas que hay y se consolidarán los muros de piedra de marès, y se repararán las filtraciones de la cubierta.
Estas labores se tildan de urgentes, para no perder la estructura de madera con los escudos en bajorrelieve que decoran la cubierta del salón.
Por otro lado, esta segunda fase de las obras permitirá reformar las dependencias que dan a los jardines del Bastió des Governador, donde hay también filtraciones y graves problemas de humedad.
Igualmente, se recuperarán arcos históricos que a día de hoy están tapiados, y se suprimirá la compartimentación actual, realizada con estructuras prefabricadas para ubicar despachos.
Las obras suponen una inversión de 1.079.925 euros, que se financiará íntegramente por el Ejecutivo autonómico.