Los cuatro nuevos radares pedagógicos instalados en Son Perruquet y la costa de Sant Lluís muestran desde el lunes la velocidad de aproximación de los vehículos para concienciar a los conductores y mejorar la seguridad vial en estos puntos del municipio. Dos de los dispositivos son fijos y están ubicados en Son Perruquet para controlar la velocidad y evitar riesgos en la zona cercana a las escuelas y centros donde se concentran gran número de menores y familias.
Los otros dos radares son móviles y, de momento, están situados cerca de Binibèquer y Es Caló Blanc para moderar la velocidad de circulación de aquellos conductores que acostumbran a ir demasiado rápido en estas localidades de la costa sur. La intención del Ayuntamiento, indica el concejal de Movilidad, Jorge De Diego, es colocar estos dos radares móviles en otros puntos del municipio en los que se tenga constancia de que se repiten excesos de velocidad.
El objetivo, aseguran desde el Consistorio, es recoger datos y supervisar el cumplimiento de los límites de velocidad en estas carreteras. Asimismo, insisten en la idea de que son radares pedagógicos y no sancionadores, como los otros cuatro dispositivos que hay en el núcleo urbano de Sant Lluís. Uno está instalado en la zona escolar, junto a las pistas de pádel, otros dos están en la Avinguda de Sa Pau y el cuarto está situado a la entrada de la calle Sant Lluís. El equipo de gobierno está satisfecho con el funcionamiento de los radares, que tienen como fin concienciar a los conductores de la importancia de respetar los límites de velocidad.
NO TIENEN OTRA COSA EN QUE DESPERDICIAR NUESTRO DINERO?....LUEGO LAS CARRETERAS SIN PINTAR HACE MIL AÑOS...