El Consell de Menorca ha cerrado ya la consulta a los ayuntamientos sobre qué aspectos del Plan Territorial Insular (PTI) aprobado el pasado mayo proponen revisar, para adaptarlo a la realidad municipal, y ahora se iniciará el trabajo para modificarlo tal y como se comprometió el equipo de gobierno del PP en su programa electoral. Las modificaciones serán puntuales y se realizarán con recursos técnicos del propio Consell, para que el proceso sea más rápido –a los ayuntamientos se les requiere que planteen sus peticiones pero también propuestas de redactado de artículos–, aunque tampoco se descarta externalizar algún trabajo relacionado con la documentación ambiental.
Con dichas aportaciones municipales, que «no suponen un cambio de modelo territorial», avanza la consellera de Ordenación Territorial y Turística, Núria Torrent, se redactará un texto refundido que será objeto de análisis e informes por parte de los servicios técnicos y jurídicos, antes de su aprobación inicial por el pleno de la Corporación y su posterior exposición pública.
La idea es tener ese texto con el nuevo articulado dentro del primer trimestre de 2024, afirmó ayer la consellera Torrent, quien explicó que la carta a los ayuntamientos se remitió a finales de septiembre y en este momento la práctica totalidad ha realizado sus aportaciones.
En cuanto a la zonificación para el alquiler turístico, que el PP se comprometió a cambiar también de acuerdo con las peticiones municipales, Torrent no avanzó posibles propuestas. Sí señaló que el estudio sobre la capacidad de carga de Menorca, fundamental para solicitar al Govern que levante o no la moratoria de plazas turísticas, se ha encargado a los mismos técnicos que elaboraron el PTI vigente.
El apunte
Dos casos: el desarrollo industrial de Alaior y el crecimiento poblacional en Ciutadella
Entre las modificaciones puntuales solicitadas por los ayuntamientos hay dos que ya se han anunciado por los municipios de Alaior y de Ciutadella. El primero busca revertir la reducción de superficie del polígono industrial de Alaior, La Trotxa, que se aprobó con la revisión definitiva del Plan Territorial. Por su parte, el Ayuntamiento de Ciutadella también quiere echar atrás la calificación como suelos rústicos de terrenos que el Plan General de Ordenación Urbana recoge como urbanizables, con el objetivo de no limitar el crecimiento poblacional.