Los trabajos para erradicar las plantas invasoras que amenazan la flora autóctona menorquina obligan a actuar en parajes de muy difícil acceso. La Agencia Menorca Reserva de Biosfera ha contratado en las últimas semanas un servicio de especializado en trabajos verticales para poder actuar en acantilados y otros puntos recónditos.
En Sa Mesquida y Es Grau se han podido retirar dos toneladas de Carpobrotus edulis, más conocida como patata frita, una especie procedente de Sudáfrica ha invadido buena parte de los territorios de clima templado en todo el mundo.
En los taludes de la central térmica del puerto de Maó se ha eliminado una tonelada de Cenchrus setaceus. En este caso se trata de una planta de origen africano y del sudeste asiático cuya presencia se ha descontrolado desde que empezó a utilizarse en jardines ornamentales.
Los especialistas que han llevado a cabo este trabajo han tenido que hacer descensos en rápel y acceder a puntos escondidos de la costa en barca para eliminar la vegetación invasora. Desde el año 2015, el control de estas plantas forma parte de la estrategia de conservación de la Reserva de Biosfera de Menorca.