La mascarilla ha regresado y aunque su uso no es generalizado, cada vez es más visible estos días de catarros, toses y estornudos en personas que la usan por la calle, las oficinas, las consultas o el transporte público de manera voluntaria y natural. Todo ello antes de que entre en vigor la obligatoriedad de su uso, a partir del miércoles, en los centros sanitarios. La decisión del Ministerio de Sanidad se ha adoptado después de que el Consejo Interterritorial de Salud con las comunidades autónomas acabara este lunes sin acuerdo.
Menorca, como es habitual cada invierno, lleva cierto desfase en el nivel de incidencia de las infecciones respiratorias, aún no ha alcanzado el pico, y por eso este lunes las clases comenzaron con normalidad, los colegios e institutos no notaron la ‘tripledemia' de gripe A, covid-19 y Virus Sincitial Respiratorio (VRS, causante de la mayoría de casos de bronquiolitis) que sí afecta con fuerza en la Península y en Mallorca. Aun así, los docentes consultados se expresaron con cautela, «hoy estamos normal, con todos los profesores incorporados y ninguna clase en la que falten muchos alumnos, mañana ya veremos», señalaba la directora de La Consolación, Cristina Martí.
Todos están preparados, la teoría se la saben de memoria después de los años de pandemia, cuentan con material de protección suficiente: mascarillas por si vuelven a ser obligatorias, gel hidroalcohólico y purificadores de aire, que en muchos centros ya se ponen en marcha. Además, tras recibir la circular de Educación y Salud, los centros se prepararon unos días antes con la puesta en marcha de calefacciones para caldearlos.
«No hay muchas ausencias, y todo el mundo está concienciado de que, si tiene síntomas, mejor quedarse en casa», señaló el director del CEIP Maria Lluïsa Serra de Maó. «No tenemos una incidencia destacada», comentaron desde los colegios Mare de Déu de Gràcia, en Maó, y Mestre Duran, en Alaior. Todos recibieron el día 5 una circular con recomendaciones preventivas ante las infecciones respiratorias para no bajar la guardia y evitar los contagios en las aulas. Lo que sigue fallando, explicó este lunes la consellera de Salud, Manuela García, es la inmunización, «hay una importante falta de vacunación en los niños», aseguró.