La Conselleria del Mar y el Ciclo del Agua, a través de la Agencia Balear del Agua y la Calidad Ambiental (Abaqua), ha autorizado la contratación del proyecto constructivo de un nuevo emisario marítimo-terrestre de la depuradora conjunta Maó-Es Castell, para que la conducción no atraviese, como actualmente, el castillo de Sant Felip, un Bien de Interés Cultural. Desviar el emisario que lleva el efluente de la macrodepuradora al mar costará unos 10 millones de euros, según un primer presupuesto estimado, y la obra puede tardar en completarse años, pero este paso es fundamental, el proceso arranca ya.
El conseller del Mar y Ciclo del Agua, Juan Manuel Lafuente, dio a conocer este avance en la reunión de la Junta de Fundadores del Consorcio Militar de Menorca celebrada el lunes en Maó. Lafuente aseguró este miércoles que «este es un paso muy importante para dar solución a una reivindicación histórica del Consorcio», que autorizó el trazado actual del emisario por la zona militar –partiendo por la mitad las ruinas y galerías del castillo–, «como una solución provisional» pero que aún perdura. El conseller celebra que después de años de discusión sobre el trazado, se cuente con una alternativa viable, y recordó que el agua que se vierte al mar «sale en estado correcto, no contamina, cumple todas las normativas ambientales».
En mayo de 2023 se presentó el estudio que concluye la viablidad de ejecutar este desvío del emisario, a la vez que recomienda un trazado y un conjunto de medidas correctoras para minimizar los potenciales impactos de esta gran obra de infraestructura hidráulica. El consejo de administración de Abaqua aprobó el pasado noviembre el inicio de la aprobación del gasto para contratar el proyecto constructivo del nuevo emisario, por un importe de licitación de 181.500 euros (con IVA). Lafuente afirma que está ya a punto de licitarse esa redacción del proyecto, que contempla una conducción de 3.700 metros de longitud. Las principales actuaciones serán la renovación del tramo terrestre, desde la depuradora hasta la zona urbana de Es Castell, con sistemas convencionales de zanja; la creación de un nuevo tramo de emisario mediante la técnica de perforación horizontal dirigida, de 1.400 metros de los cuales 300 se ejecutarían en el tramo terrestre, cerca de la costa, y los 1.100 restantes en el tramo submarino; y por último, un nuevo tramo de emisario submarino lastrado y apoyado en el fondo, de 700 metros de longitud. El trazado para evitar el fuerte de Sant Felip discurriría por la Avinguda des Port, en Sol del Este, para luego adentrarse hacia la costa e iniciar el tramo en el ámbito marino.
La ejecución de esta obra se espera desde hace 20 años. Ya en 2006 se detectaron filtraciones procedentes del emisario que ponían en riesgo la conservación de las galerías del castillo. El emisario actual es antiguo, se construyó a principios de los años 80. El material de sus tuberías es hormigón/fibrocemento y es recomendable su sustitución.