Menorca ha amanecido este sábado cubierta de polvo en suspensión procedente del norte de África. Durante los últimos días el polvo ya estaba presente en el aire, pero ha sido principalmente durante este viernes y la noche cuando las partículas han sido mayores. Tal ha sido la acumulación de estos aerosoles que no han caído por lluvias, sino que por lo que se conoce como 'deposición seca', es decir, que se han precipitado por su acumulación y por la gravedad.
Ya este viernes, los satélites captaron esta nube de polvo que desde el norte de África cubría Balears. arrastrado por el viento en superficie. La consecuencia de esto ha sido que coches, calles y terrazas han quedado 'rebozadas' por esta fina capa de barro, además de una mala calidad del aire y poca visibilidad.
Ahora bien, la buena noticia es que esta masa de polvo ya se ha desplazado hacia el este y que no volverá a afectar Balears los próximos días, como se aprecia en la previsión de este mapa del sistema europeo Copernicus:
Lluvia a la vista, pero poca cantidad
Lo que sí se acerca es un sistema frontal que, otra vez, llegará a Balears después de cruzar la Península Ibérica, aunque ya bastante desgastado. A partir de las últimas horas del sábado, el cielo estará más cubierto. Será durante la noche cuando se espera que el frente cruce Menorca y deje algunas lluvias, pero no se esperan cantidades importantes, como máximo unos 10 litros por metro cuadrado. El viento soplará con intervalos fuertes, del suroeste, con rachas de entre 60 y 70 kilómetros por hora, hasta el domingo por la tarde.
A partir del lunes, la situación meteorológica irá mejorando, ya con el cielo poco nuboso. Será a partir del martes cuando un anticiclón abrazará Balears, con lo que se espera una mayor estabilidad en el tiempo, y una subida de las temperaturas, que será más importante a partir de la segunda mitad de la semana.