La propiedad de los terrenos que ocupan la parcela habilitada como estacionamiento de vehículos junto a la playa de Son Bou, explicó ayer que valoran tomar una iniciativa similar a la que ejecutó el miércoles el dueño del solar de Cala en Porter.
Tumeu Janer, en representación de Edivisa, propietaria de la urbanización, recuerda que la ley de Costas supuso la expropiación del parking en la práctica, «a cambio nos tenían que dar una concesión administrativa por 75 años, como marca la ley, pero seguimos esperando».
Recuerda Janer que «hace años que aguardamos una respuesta pese a nuestra insistencia, por eso al ver lo que han hecho en Cala en Porter, también hemos vuelto a poner sobre la mesa esta posibilidad de cerrar el parking como medida de presión para que nos atiendan». De obtenerla, procederían a adecuar el terreno y se plantearían regular su acceso y explotación.
En días punta de verano los cálculos indican que pueden acudir unos 1.000 vehículos a Son Bou cuando, sin el parking habilitado, solo hay unas 200 plazas reguladas para quienes vienen exclusivamente a la playa más grande de la Isla.