El gobierno del Consell de Menorca no destituirá al director insular de Medio Ambiente, Mateu Aínsa, porque entiende que los hechos que le han llevado a dimitir como concejal del PP en Maó «corresponden a su ámbito privado».
Además, el concejal dimitido ha manifestado sentirse «profundamente arrepentido» y se ha disculpado públicamente de forma reiterada.
Así lo ha afirmado el vicepresidente de la institución y conseller de Medio Ambiente, Reserva de Biosfera y Cooperación, Simón Gornés, para quien Aínsa «ya ha asumido las consecuencias al dimitir de sus cargos en el Ayuntamiento de Maó».
Gornés cree que su renuncia al acta de concejal en la oposición «es una decisión que le honra, ya que todos sabemos del esfuerzo, la ilusión y la dedicación que tiene hacia su ciudad».
El conseller argumenta que «los hechos desafortunados» que Aínsa protagonizó «corresponden a su ámbito privado y que su gestión en el Consell es «satisfactoria». Por tanto, ha concluido Gornés, «habida cuenta de las actuales circunstancias», no se modificará el área de Medio Ambiente.
Lo que dice el código de buen gobierno
El código de buen gobierno del Consell de Menorca compromete a los representantes insulares a «respetar y hacer respetar los derechos humanos, fomentar los valores cívicos y utilizar un tono respetuoso en las intervenciones, tanto hacia cualquier otro miembro de la corporación como hacia otra administración o la ciudadanía».
A diferencia de este caso, el presidente del Consell, Adolfo Vilafranca, sí ha destituido a dos directores insulares en su primer año de gobierno: a la de Proyectos y Cooperación, por organizar una fiesta privada en el islote público del Lazareto, y al de Vivienda, tras denunciar éste el presunto acoso laboral que sufría por parte de su consellera.
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