El departamento de Ordenación Turística del Consell de Menorca lleva abiertos en lo que va de temporada –de principios de mayo a final de agosto– un total de 21 expedientes sancionadores por alquiler turístico ilegal que suman una propuesta de sanción de 632.000 euros.
Esto supone una sanción media de 30.000 euros por expediente. Es el balance de la actividad del cuerpo de inspectores de la institución, que en todo el año pasado informó de la incoación de 44 expedientes.
Teniendo en cuenta que hasta el mes de mayo se había informado de la apertura de cerca de una veintena de expedientes, todo parece indicar que cuando termine el año se superarán las cifras de 2023, aunque todavía está lejos de las cifras de 2022, cuando el número de casos motivados por infracciones en el alquiler de viviendas a turistas alcanzó los 57.
Cabe recordar que el régimen sancionador de la Ley Turística establece multas de hasta 40.000 euros en los casos graves, que podrían ascender hasta los 400.000 euros en los casos considerados muy graves, como la reincidencia en una práctica considerada grave.