Los abogados menorquines se preparan para una reactivación de las reclamaciones de gastos hipotecarios, después del fallo del Tribunal Supremo en el que resuelve que el plazo para reclamar no empieza a correr hasta que el consumidor tiene conocimiento cierto de que en su préstamo existe una cláusula abusiva, la que le endosó los costes que tenía que haber abonado su banco. El Supremo asumió en junio pasado con dicha sentencia la doctrina europea, que zanjó en abril las interpretaciones sobre el plazo para reclamar y que ahora ofrece la posibilidad de recuperar los gastos de hipotecas antiguas.
Con anterioridad existían diversos criterios sobre la prescripción de ese derecho: cinco años a contar desde que se abonaron los gastos o cinco años desde enero de 2019 –cuando otra sentencia del Supremó fijó el reparto de los costes–, plazo que acababa en enero de este año, aunque luego se amplió a abril de 2024.
En la práctica la sentencia emitida por el Tribunal Supremo, que sigue el criterio del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE), significa que miles de casos no han prescrito y esto «abre la puerta a mucha gente que tiene hipotecas previas a 2019 para que puedan reclamar su dinero», explica la abogada Magda Abad, quien ha podido recuperar gastos hipotecarios de clientes que compraron su vivienda y formalizaron sus préstamos diez o incluso veinte años atrás.
Y es que el fallo europeo supone un varapalo para la banca y un respaldo para los consumidores, ya que no tiene en cuenta el momento en el que se firmó el préstamos hipotecario, sino que el día inicial del plazo de prescripción de la acción de restitución de gastos hipotecarios, pagados indebidamente por el cliente, será el de la fecha de la firmeza de la sentencia que declara la nulidad de la cláusula que obligaba a dichos pagos. Esto es, cuando lo reconoce un juez. En este momento algunas entidades financieras, conocedoras de la doctrina, ni siquiera llegan a litigar y asumen los gastos. «Muchos casos se están resolviendo sin necesidad de ir a juicio», afirma Abad, quien desde 2017 ha llevado demandas para recuperar los gastos hipotecarios. Ahora la letrada de Alaior aconseja a aquellos que se hipotecaron antes de que la ley exigiera a los bancos asumir estos gastos «que no desistan, porque se pueden recuperar».
También Francisco Marqués, abogado de Ciutadella, constata el interés de consumidores que preguntan en su despacho por este cambio. «Antes era un poco lotería pero ahora existe el amparo de esta sentencia y vuelve a abrirse la puerta a reclamar, yo animaría a que la gente con hipotecas antiguas lo hiciera», afirma.
Algunas entidades responden rápido, apunta Magda Abad, «hay bancos que están pagando casi de forma inmediata una vez se presenta la reclamación extrajudicial», por lo que hay casos de clientes que en 15 días han ingresado un dinero que ya daban por perdido.
El apunte
Una media de mil euros, entre costes de notaría, registro, tasación y gestoría
Las cantidades que se están retornando se sitúan de media en torno a los mil euros, señala la abogada Magda Abad. Los gastos pagados indebidamente y que se pueden recuperar son la mitad del coste de la escritura en la notaría, y el cien por ciento de lo que se pagó por la inscripción registral del préstamo (la inscripción de la cancelación corresponde al prestatario) y la totalidad también del recibo de la tasación y la gestoría.