El Ayuntamiento de Maó ha detectado la presencia de nitratos en la planta desnitrificadora de Malbúger que suministra agua potable a gran parte de la población. Por este motivo, ha decidido paralizar temporalmente esta instalación, hasta que estén «garantizados los criterios sanitarios de calidad del agua establecidos por la normativa vigente».
El funcionamiento incorrecto de la planta se ha detectado en los análisis del agua que se hacen de forma periódica, y que han revelado una presencia de nitratos «ligeramente superior» de los 50 miligramos por litro, que es lo que marca la normativa como agua no apta para el consumo humano.
Ante ello, el Ayuntamiento ha enviado un aviso importante a la población de Maó para que no consuma agua de la red ni para beber ni para cocinar, aunque sí pueden utilizar «sin riesgo para la salud» para la ducha o para limpiar la ropa o los utensilios de cocina.
Los cerca de 7.300 hogares de Maó que reciben agua de la desnitrificadora de Malbúger se han enterado este jueves de que no es apta para el consumo humano desde hace un mes, debido a una serie de incidencias en el funcionamiento de la planta que han hecho que se eleven los niveles de nitrato y no se pueda garantizar la total desinfección del agua que suministra a la red.
El informe de Hidrobal que pone de manifiesto estas deficiencias está firmado el 21 de agosto y tuvo entrada en el Ayuntamiento de Maó unos días después, pero no se han tomado medidas hasta a primera hora de la tarde de este jueves, cuando se paró la planta y se emitió un aviso a la ciudadanía a través del servicio de información municipal por Whatsapp.
El alcalde de Maó, Héctor Pons, ha declarado haber tenido conocimiento este jueves a primera hora de la tarde de la situación en la planta desnitrificadora y «automáticamente se ha dado el aviso a la ciudadanía de que el agua no es potable». Pons ha afirmado que el informe de Hidrobal en el que se advierte del elevado nivel de nitratos y del mal funcionamiento de la planta de Malbúger tuvo entrada en el registro municipal el pasado 23 de agosto pero la técnica de medioambiente se hallaba de vacaciones y, posteriormente, se puso de baja, por lo que no fue analizado. «Me entero hoy», ha subrayado, muy molesto con la situación y aceptando que «es difícil de entender que pase esto, pero no ha habido ninguna intención de ocultar nada».
El alcalde ha añadido que fue precisamente el Ayuntamiento el que hizo a Hidrobal un requerimiento en julio para que le pasara datos sobre el funcionamiento de la planta desnitrificadora ya que «hacía tiempo que no enviaban resultados de las analíticas».
En funcionamiento desde hace tres años
La planta desnitrificadora de Malbúger entró en marcha en octubre de 2021 tras una inversión de 609.000 euros. Desde entonces suministra agua a cerca de 7.300 casas de Maó, el 48 por ciento de los domicilios. Asimismo, Maó tiene prácticamente lista una segunda planta desnitrificadora (en Sant Climent), que solo está pendiente del visto bueno de la Conselleria de Sanidad para que pueda suministrar agua potable al resto de la población.