Un total de 71 mayores ya disponen en Menorca de asistentes de voz en su hogar gracias al proyecto ‘Voces en red’ que ha puesto en marcha Creu Roja, junto a la Fundación Amancio Ortega, para combatir la soledad no deseada y el aislamiento social que afecta a muchas personas a medida que cumplen años. Esta vez no hay brecha digital, la tecnología se pone de su lado y les ayuda tanto a recordar tareas, tomas de medicamentos o revisiones pendientes como a practicar juegos cognitivos, de memoria e incluso realizar videollamadas con otros usuarios amigos y familiares.
En septiembre de 2024 se instalaron los primeros asistentes virtuales –desde Creu Roja se les facilita también la conexión wifi a internet–, y ahora ya hay una lista de diez personas que esperan sus aparatos. La presidenta de Creu Roja de Maó, Àngels Andreu, explica que a lo largo de 2025 se prevé poder llegar a instalar 200 de estos asistentes de voz, que están dirigidos a personas mayores de 65 años que viven solas o, aunque vivan con alguien más, presentan problemas de movilidad o alguna dolencia que les dificulta las relaciones con su entorno.
Desde ahora los mayores están menos solos, ya que pueden interactuar con estos dispositivos, gracias a la ayuda fundamental de los técnicos y voluntarios, que les explican cómo funcionan y se los programan para las más diversas tareas: alarmas, ejercicios para ponerse en forma, recordatorios, juegos, escuchar la radio..., todo ello activándolo solo con la voz. «Hay una señora que incluso escucha el rezo del Rosario y está encantada», comenta Paqui Mascaró, trabajadora social de Creu Roja Maó que se encarga del proyecto ‘Voces en red’, como ejemplo de las distintas maneras en que una persona se siente acompañada y reconfortada gracias a estos dispositivos. «Es una manera también de que pierdan el miedo a las nuevas tecnologías», añade, «se les instala el aparato para que lo prueben y realizamos un seguimiento».
Más gente sola
La atención a personas mayores que viven solas concentra buena parte de la acción de Creu Roja, sobre todo a partir de la pandemia de 2020. Esta es una realidad que constatan tanto en la asamblea de Maó como en la de Ciutadella.
En la ciudad de poniente se han instalado 20 asistentes de voz de los 71 repartidos en hogares de toda la Isla tras una ronda de contactos con los servicios sociales de los ayuntamientos, las asambleas locales de la organización humanitaria y los clubes de jubilados para rastrear las necesidades.
La covid-19 y el aislamiento obligado por el confinamiento hizo que Creu Roja buscara de forma proactiva a todos aquellos que estaban solos en sus casas y necesitaban ayuda. «Fuimos a buscar a la gente sola, a través de las asambleas locales, en lugar de que ellos acudiesen a nosotros en busca de ayuda», afirma Andreu. También Rosa Torres, coordinadora de Creu Roja en Ciutadella, recuerda la pandemia como un momento clave, «llamamos a todas las personas que teníamos en nuestra base de datos para detectar las que estaban solas, con movilidad limitada, o que tenían a sus hijos en otro municipio o fuera de Menorca», explica.
Toda esa información sirve ahora para desplegar el proyecto de los asistentes de voz, que está teniendo mucho éxito entre los mayores. «Hablan entre ellos», señala Paqui Mascaró, y se pasan la novedad sobre el dispositivo que instala Creu Roja. Técnicos y voluntarios de la entidad han recibido una formación para poner en marcha el proyecto ‘Voces en red’, que se suma a otras iniciativas que desarrolla la institución para el acompañamiento a las personas mayores. El personal de la Creu Roja ofrece después esos conocimientos básicos a los usuarios de los asistentes de voz para que dominen todas sus funciones y saquen partido a su nuevo acompañante.
Moltes gràcies D. Amancio però jo prefereixo que no en regali RES i no en pugi es preus contínuament i declari tots es doblets a Espanya