Es la decimosegunda sentencia que pierde el Ayuntamiento de Ciutadella por demandas de su personal. En este caso fue interpuesta ante el Juzgado Contencioso Administrativo número 3 de Palma por dos policías locales, aunque afecta a otros 12. El fallo le condena a pagarles 1.190 euros más intereses a los dos demandantes por la compensación de gastos de vestuario reconocida por ley, entre los años 2020 y 2023 en un caso, y hasta 2024 en el otro.
Los afectados, uno de ellos Ramón Silvela, ya jubilado, ejercen como policías vestidos de paisano, algunos de ellos en segunda actividad. Por normativa, sin embargo, el Ayuntamiento debe abonarles el 60 por ciento del importe que reciben los agentes por este concepto, ha explicado Silvela, lo que no había hecho desde 2020.
El que fuera delegado sindical lamenta el coste que supone para las arcas municipales la interpretación que hacen sus técnicos de Recursos Humanos sobre las leyes y normativas jurídicas. Ese criterio, explica, las once sentencias anteriores por ir en contra de los derechos de los trabajadores, como ha sucedido en la más reciente, aunque ya anuncia una nueva demanda por otra suma que, asegura, le adeuda el Ayuntamiento.
Silvela defiende que ya sería hora de que se imputase un delito de prevaricación administrativa a algún técnico y político del Consistorio por estos motivos.
El que està clar es que l'administració ha de donar llum en ves de fum, lo més trist es que amb l'època de la srª Joana Gomila (i la resta de partits "progres), han perdut tots el procesos contra els treballadors (laborals /funcionaris), i això ho paga el poble, , ara bé, a la srª Gomila, el seu partit la va enviar a Palma amb una bona paga fins que es jubili, mentres que ella quan era a l'ajuntament només pensava en anar contra els treballadors, tan li feia els convenis, pactes o acorts que hi havia firmats. El que hauria de sortir es el nom i llinatges dels tècnics tan profesionals de l'ajuntament, que han permés això. Partits polítics progressistes, es igual a hipocresía.