Con motivo de la celebración del Día Mundial Contra el Melanoma, la Asociación Española contra el Cáncer ha instalado en la plaza Artrutx de Ciutadella una carpa informativa, junto al Colegio de Farmacéuticos, para incidir en la importancia de protegerse del sol. El lunes la iniciativa se trasladará a la plaza Esplanada de Maó.
En 2024 se diagnosticaron en las Islas 142 nuevos casos de melanoma de piel y 303 de cáncer de piel no melanoma. En toda España la incidencia de estos tumores ha aumentado un 40 por ciento, más rápido que cualquier otro tipo de cáncer.
El principal factor de riesgo es evitable y está relacionado con las radiaciones ultravioletas, en su mayor parte procedentes de la exposición solar excesiva. «Muchos de estos casos podrían haberse evitado siguiendo unas pautas muy sencillas de prevención, fundamentalmente desde la infancia: la piel tiene memoria», ha destacado el presidente de la AECC en Balears, José Reyes.
Las nubes no protegen
Aina Bordoy, vocal de dermofarmacia del Colegio de Farmacéuticos, ha explicado que hay que evitar la exposición solar en las horas centrales del día y utilizar fotoprotector también en los días nublados, además de aplicarlo al menos media hora antes de exposición al sol, y renovar la aplicación cada dos horas.
Ha recomendado utilizar gafas de sol homologadas, gorra, fotoprotector labial y no olvidar ponerse crema detrás de las orejas, nariz y pies.
«Es muy importante consultar al farmacéutico en caso de tomar alguna medicación ya que hay algunos fármacos fotosensibilizantes que pueden crear reacciones adversas», ha remarcado el presidente del Colegio, Antoni Real. También recomienda preguntar en casos especiales como para proteger a niños, embarazadas o personas mayores.
En las carpas se ha informado a los interesados de cuál es su fototipo de piel, tras una medición individual de melanina, y se les ha indicado cuál es la protección solar que necesitan en cada caso. Además de la prevención, la AECC anima a vigilar la aparición de lesiones anómales en la piel, algo que permite poder realizar diagnósticos en fase precoz, por medio de la autoexploración cutánea.