La Conselleria de Salud recurre de nuevo este año al decreto ley para derivar atenciones urgentes y emergencias a centros sanitarios privados, y de este modo, descongestionar las Urgencias de la red pública. Durante el año pasado se derivaron 24.802 atenciones urgentes a las clínicas privadas mediante el Centro de Coordinación de Emergencias Médicas del SAMU 061. De estas, las asistencias derivadas en Menorca, de junio a diciembre de 2024, fueron de un total de 1.085 pacientes, según datos ofrecidos por el IB-Salut.
El decreto establece que el Servicio de Salud de Balears cubrirá el coste económico de la asistencia sanitaria prestada por las entidades privadas adheridas a la Red de Centros y Servicios Sanitarios de Apoyo a la Asistencia Sanitaria Urgente y Emergente de las Islas –en Menorca solo está la Red Juaneda–, centros que presten asistencia sanitaria urgente o emergente a ciudadanos que, cumpliendo los requisitos exigidos, sean atendidos en esos hospitales privados y cuya atención no pueda ser cubierta por ningún otro seguro.
La mayoría de las entidades asociadas a la Unión Balear de Entidades Sanitarias (Ubes) ha decidido formar parte de esta red, tanto en lo que se refiere a sus instalaciones hospitalarias como a las extrahospitalarias, lo que permite esponjar las urgencias del sistema público de salud.
El Decreto ley 1/2024, cuya renovación anunció la Conselleria de Salud, está orientado a prestar asistencia sanitaria a usuarios que estén en una situación clínica que obligue a una atención inmediata, como puede ser un accidente de tráfico o un problema repentino de salud. Esta asistencia se puede prestar en cualquiera de los centros de la red, siempre de acuerdo con el criterio del facultativo que les asista, la viabilidad del traslado en función de la distancia, el estado del usuario y la capacidad y disponibilidad de la prestación de asistencia que, en cada momento, tengan los centros de titularidad pública y los otros centros habilitados.