Este mes han finalizado en Es Migjorn Gran las obras de renovación de la red de agua potable, una actuación que ha permitido frenar pérdidas diarias de hasta 60 metros cúbicos de agua que anteriormente no llegaban a los hogares.
Con una inversión de 245.000 euros desde principios de año, la intervención ha supuesto la instalación de una nueva canalización de polietileno de 200 milímetros de diámetro, que conecta el depósito municipal con el Carrer Major.
Este tramo se enlaza con la red ya renovada en 2018 durante otras obras de mejora en la zona. Además de la sustitución de la tubería principal, se han llevado a cabo las acometidas particulares hasta las viviendas a lo largo de un tramo de 600 metros y se ha repuesto completamente el pavimento afectado por las obras.
Según el concejal de Medio Ambiente, Antoni Borràs, los nuevos conductos y filtros potabilizadores han permitido reducir considerablemente las pérdidas de agua, que anteriormente alcanzaban hasta el 40 por ciento del suministro. La actuación solo está pendiente ahora de su recepción oficial para quedar plenamente finalizada.
Pues es una buena noticia y otros ayuntamientos deberían hacer lo mismo y no las charlotadas habituales sobre el consumo de agua cuando llega esta época del año.