Vecinos y empresarios lamentan la imagen «tercermundista» que ofrece Ciutadella a los visitantes por la problemática de las basuras. Es una cuestión que viene produciéndose desde hace meses, cuando, a dos camiones averiados, se le sumó el incendio de otro. Por parte del Ayuntamiento y de la empresa concesionaria, FCC, motivó una reestructuración del servicio, con la supresión y reubicación drástica de contenedores para optimizar rutas, sin que hasta la fecha, con el arranque de los meses punta de la temporada, se haya normalizado la situación.
Ya hace semanas que asociaciones vecinales, residentes y empresarios vienen señalando las carencias del servicio, tanto en el casco urbano, como en las distintas urbanizaciones. En la asociación Restauración Menorca, su presidente, José Bosch, lamenta que se haya perpetuado la medida tomada a finales de abril, reubicando y concentrando contenedores en puntos estratégicos para que los pocos vehículos operativos asumieran la carga de los averiados. «Es verdad que hay mucho incivismo, pero ponen los contenedores muy lejos de la gente» y se acaban generando zonas conflictivas, con acumulaciones de desechos.
«A los visitantes hay que darles facilidades, no mandarles a pasear con la bolsa de basura» y «si no hay camiones, que compren», afirmaba rotundo Bosch, para quien «solo son excusas y, al final, estamos dando una imagen tercermundista».
Vecinos
La problemática se extiende a lo largo de todo el municipio. En Cala Blanca, Antònia Benejam, vecina que reside en el núcleo turístico todo el año, entendió la reestructuración del servicio a raíz de las averías de los camiones «para acortar las rutas», pero también se queja de la eternización de la situación. «Antes, entre dos bloques de apartamentos había cuatro contenedores, ahora, ninguno, y ocurre que la gente deja las bolsas de basura junto a las papeleras». Asegura que «ocurre en toda la urbanización» y que «pájaros y gatos rompen las bolsas» y genera insalubridad.
También en Cala en Blanes, residentes habituales como Marina Trombin ven con asombro que «hay muchos sitios con basura, abandonada desde hace dos meses, desde que el Ayuntamiento movió los contenedores». Todo ello «dificulta sacar la basura, sobre todo a los vecinos de más edad» y tras las fiestas de Sant Joan «estuvieron las bolsas más de una semana, los animales las rompían y olía a podrido». Y no solo eso, «al parecer, Ciutadella tiene el mismo personal de limpieza que en 2010», asevera Trombin.
También en la Associació de Comerciantes de Cala Blanca captan «un descontento generalizado» entre sus asociados. Eso es, «tanto por la reducción de contenedores, como por la suciedad que se acumula, como por el servicio ‘puerta a puerta’» para las fracciones de cartón, plástico y cristal, según indicó su presidente, Ignasi Bosch. Y es que a menudo se recogen con retraso, los comerciantes deben vigilar a los turistas que dejan allí sus basuras, y reciben advertencias por lo que está mal fragmentado. «Se nos negaron candados» y, con todo, «sería más cómodo llevarlo nosotros mismos» a la deixalleria.
Toda la razón han puesto los contenedores tan lejos que la gente tiene que coger el coche para ir en su busca.Otros que no conocen la zona, al no encontrar ninguno, déjan la basura al lado de una papelera, etc. Y otros por no tener que andar 500 m para el orgánico y otros 500 para el reciclaje de cartón, plástico,etc, lo tiran todo en el mismo sitio, también veo que lo dejan en el suelo como protesta por lo que esra ocurriendo. UNA VERGUENZA. En vez,de facilitarles las cosas al ciudadano ,nos las complican, y encima pagando más...⁰⁰⁰